tag:blogger.com,1999:blog-154086042024-03-07T18:04:00.839-03:00tenes fuego?Neutralvenidos al espacio destinado a mi exorcismo literario, mi pulsión de ideas convertidas en párrafos.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.comBlogger24125tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-17819609094220471732007-02-19T23:58:00.000-03:002007-02-20T00:06:13.968-03:00<span style="font-weight: bold;font-family:trebuchet ms;font-size:130%;" >Euthanatos</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Era horrible oirlo respirar...</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Antes de llegar a ese último lugar, pasé cerca de dos horas con él. Al principio era fácil, si bien estaba notablemente desmejorado, yo estaba dispuesto a enfrentar su condición. Pero minuto tras minuto me hacía más conciente de su situación, de su agonía. Le costaba respirar como nunca antes, ya ni siquiera se movía, como si quisiese ahorrar fuerzas para poder seguir respirando. En la última media hora, estoy seguro de que no podía verme. Tenía los ojos abiertos, claro, pero vacíos. No. Llenos, pero llenos de un dolor enceguecedor. Cada vez que respiraba, yo deseaba que fuese su última. Por su bien, y por el mío. Era demasiado triste verlo acostado de esa manera, informe, incómodo, sin fuerzas, sin ganas...</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">No habría vuelta atrás, pero tampoco había escapatoria. Completamente atrapados en una encrucijada planteada por nuestra propia moral: un cuadro irremediable, dos soluciones. La lucha, que acarreaba un pronóstico negativo, una lucha por la lucha en sí, sin tener una victoria en el horizonte. Sin ni siquiera un horizonte. O la solución humanitaria. Menor sufrimiento, menor agonía...</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">¿Para qué habría de estar él en un hospital? Internado, probablemente inconciente la mayor parte del tiempo, cuando no completamente estúpido por las drogas. O peor aún, sin drogas, con miedo a un lugar desconocido, conciente de sí, de nosotros, y también de su dolor.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">¿Solución humanitaria? Qué ironía que hablemos de una vía humanitaria para decidir sobre su destino. Esa solución, ese camino, no trata en primera instancia de aplacar su dolor, sino el nuestro. Claro, él ya estaba condenado, pero nosotros podíamos decidir acortar nuestro dolor, nuestra tristeza, dejar de ver esa patética y lastimosa expíación en cámara lenta que nos torturaba...</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">"Están realmente seguros de esto?" preguntó una voz, ya comenzando a quebrarse.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Tres voces quisieron responder. Pero apenas fue audible la respuesta, solo unos vagos sollozos de gargantas completamente anudadas. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">"Sí." dije. Y fue lo último que dije hasta que todo terminó.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Todos estabamos de acuerdo. Pero en ese momento, viendo el rostro de los demás, sentí que alguien tenía que ser fuerte. Alguien tenía que permanecer lo más inmutable posible. Ser un pilar, para que quién lo necesite tenga donde apoyarse.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">¿Altruísmo? Eso pensé. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Pero cuando me noté completamente paralizado, sin poder mover las piernas, sin poder decir absolutamente nada, sin siquiera poder mirar a nadie a los ojos, me di cuenta de que no era altruísmo. Era miedo. Estaba completamente asustado por lo que iba a suceder. ¿Cómo puede alguien estar preparado para algo semejante? Estaba aterrado, y ese miedo incluso paralizó mis lágrimas. Calmó mi respiración, secó mis labios y mi lengua, y entumeció completamente mis mente. Me había convertido en un espectador, atado a mi lugar, con los ojos abiertos, y habiendo dicho que "sí".</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">"Bien, entonces vamos a empezar" dijo ella, y puso sobre la mesa una goma elástica, una jeringa, y un frasco. Primero le inyectó un calmante, una poderosísima anestesia que lo dejaría completamente aturdido, casi en coma. Fue terrible lo que hizo para darse cuenta si la droga había hecho efecto. Un sólo gesto, me llevó a la conclusión de que no existe una solución humanitaria, ni para él, ni para nosotros. Con la llema de su dedo mayor, le golpeó el ojo abierto, que apenas parpadeó. Fue horrible, fue completamente cruel, y todos tuvimos que verlo. Fue un gesto completamente grosero, que apelaba a la inmovilidad del ojo, lo que nos decía a todos, ineludiblemente, que la droga se iba a poderando de su cuerpo. Ese gesto despiadado se repitió tres veces, hasta que el ojo no parpadeó, no reaccionó a la agresión. Entonces le ató la goma elástica a su pata delantera izquierda y comenzó a afeitarla, para localizar una vena. Pero no iba a poder hacerlo con el cuerpo del gato completamente relajado y desparamado en la camilla. Pidió que alguien le tenga la cabeza, para mantenerle las patas rectas. Quién en ese momento lo estaba acariciando era Lucas, que como todos, estaba entumecido por la situación, y lo único que podía hacer era reaccionar a la orden de la veterinaria. Y así lo hizo.</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Creo que cuando lo vi en esa situación asquerosa, y trístemente patética, sentí alguna especia de piedad, o compasión por él. Algún sentimiento extraño, o de unión, o de lástima, me empujó a realizar el único gesto que tuve todo ese día con alguno de los que me acompañaban. Puse mis manos sobre las de Lucas, para yo tomar su lugar. Al poco tiempo, era el único que sostenía la cabeza del gato.</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">El segundo gesto aberrante, que todos precenciamos, fue cuando la veterinaria le afeitó la pata. Tenía una cuchilla de gilette en la mano, y se la pasaba en el sentido del pelaje. Pronto se descubrió la piel del animal, pero la doctora tenía que dejar la superficie completamente lisa para la aguja. Y fue horrible. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Yo sostenía una cabeza que tenía los ojos vacíos abiertos, y que se caía cual muñeca de trapo si aflojaba mi agarre; mis ojos estaban fijos en la pata del gato, que cada vez se tornaba más roja, porque la cuchilla iba irritando y respando la piel. Pero la mano de la veterinaria no dejaba de afeitar y mis ojos no dejaban de mirar. El animal no reaccionaba ante la brutal agresión, y todo este rito dejaba de ser humanitario.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Por fin la cuchilla se posó en la mesa. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">La aguja cargó dos mililitros de Euthanyl, un líquido de color rosa, y se clavó en la minúscula vena del animal. Sentí su cuerpo tensarse solo un segundo. Talvez no fue él, sino yo. Nunca lo sabré. Y luego lo sentí más pesado. La veterinaria dijo que ya estaba, ya habíamos terminado. Mis hermanos largaron los quejidos contenidos durante todo el procedimiento, y lloraron.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Pero era mentira, no había terminado.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Lo más cruel, ya no para el animal, que estaba muerto, sino para nosotros, fue cuando tuve que meter su cuerpo en una bolsa de residuos negra, a los empujones, torciendolo; no porque fuese una bolsa pequeña, sino porque el cuerpo estaba sin vida, lánguido, y yo no tenía fuerzas como para maniobrarlo.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Ese momento fue uno de los peores. No tuvo nada de sencillo, de facil, ni de rápido para los que estabamos ahí. Fue horrible. No sólo habíamos decidido y precenciado su muerte, sino que yo había ayudado a la mano ejecutora, y me estaba deshaciendo de su cuerpo como si fuese basura.</span><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Dentro de dos bolsas, lo llevé con mi madre al Instituto Pasteur, donde se creman los cuerpos de los animales. Mis hermanos se fueron a la casa, estaban devastados, ya habían visto demasiado. Cargué con el cuerpo muerto de mi gato en brazos en el taxi, hasta que llegamos. Y aquí fue donde sucedió el último acto de lesa humanidad. Después de dejar los datos personales, y las causas de defunción del animal, les pregunté dónde lo dejaba, esperando que traigan alguna especie de camilla, de contenedor, o que aparezca alguien que se lo lleve. Pero me equivoqué. Me pidieron que lo deje debajo de la ventana, diciendome que ya lo vendrían a buscar. Y, tonto todavía, sin mucho más que hacer que obedecer, ahí lo dejé. Bajo la ventana, dentro de dos bolsas.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Volví caminando con mi madre. Hablando de cualquier otra cosa, lo más distante a todo lo que acababa de suceder en los ultimos tres cuartos de hora. Cuando llegamos a la casa, mis dos hermanos estaban en habitaciones separadas, callados, ensimismados. Nadie habló con nadie. Y me fui.</span><br /><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">No tengo una respuesta.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">No tengo una mejor solución, o una forma alternativa para todo lo que acabo de relatar. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">No es una protesta lo que escribo. </span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">No pretendo que todo esto se cambie, porque no tengo nada que ofrecer como opción.</span><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Es sencillamente mi manera de explicarme a mi mismo todo lo que pasó, y de decirles a todos los que tienen una mascota, que si alguna vez tienen que pasar por algo similar, los entiendo.</span><br /><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">Sin más, Sin saludos, y con un Nudo en la garganta,</span><br /><br /><br /><span style="font-family:trebuchet ms;">M.</span>M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1157768818542605602006-09-08T23:25:00.000-03:002006-09-08T23:26:58.543-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>Indecisión sistemática</strong></span><br /><br /><strong>Estoy Perdido</strong><br />Estar perdido no significa no tener un camino, significa tener tantos que no se sabe a donde ir. Si no tuviese un camino, trataría de encontrarlo o generarlo según mis gustos y caprichos. Y eso es precisamente lo que hice.<br /><br /><strong>¡Trampa mortal!</strong><br />Mis gustos y caprichos son dispares. Pocos encaran la misma dirección, y los que lo hacen, se bifurcan perpendicularmente no mucho más adelante.<br />No tenía caminos y no caminaba. Descubrí mil caminos y no sé hacia donde ir. La única solución que veo es probar. Tapo mis ojos con una mano, extiendo mi otro brazo, giro sobre mi mismo muchas veces, me detengo.<br />Un camino. Camino.<br /><br /><strong>Voluntad y Tiempo.</strong><br />Mi desición nunca fue segura. Empiezo a caminar y me encuentro en la peor situación: no me adentré lo suficiente como para que el camino me absorba y todavía puedo ver el resto de los caminos que todavía me tientan.<br />Dudo.<br />Desacelero la marcha sin detenerme, aunque ya no observo el camino. Tengo los ojos abiertos pero la vista está perdida en el horizonte, en mis pensamientos…<br /><br /><em>A: ¿Debo seguir?<br />B: Sí, es el camino que elegiste.<br />C: No, podrías encontrar algún camino del que no dudar.<br />B: ¿Este no te gusta?<br />A: No sé. Sí, pero…<br />C: Dejálo. Buscá uno mejor.<br />B: Probá de seguir, dale tiempo para que lo conozcas.<br />C: Si lo que viste no te gustó, por qué te va a gustar el resto.<br />A: Sí me gusta, algo, pero no sé si es un buen camino.<br />B, C: ¿Cuál lo es?<br />A: ¿El que no me haga dudar?<br />B: ¿Por qué dudás?<br />A: Porque sé que puede haber algo mejor.<br />C: Dejá este y buscá “algo mejor”.<br />B: Si nunca conocés los caminos, los vas a dejar a todos siempre.<br />C: Amenos que uno te ilumine.<br />B: Es una cuestión de Voluntad.<br />C: Es una cuestión de Tiempo.<br />A: …</em><br /><br /><strong>Multimente o entumecimiento.</strong><br />Decido embarcarme en varios caminos a la vez. Eso debería mantenerme lo suficientemente ocupado como para no ver el maldito paisaje, y alguno de ellos debería proporcionarme resultados atractivos y estimulantes en un corto plazo.<br />Aquellos caminos que no lo hagan, puedo dejarlos para seguir buscando.<br />Necesito resultados, necesito progreso, necesito constancia, necesito utilidad, necesito reconocimiento, necesito más.<br /><br /><em>“No sé lo que quiero, pero lo quiero YA”</em><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1157768693810963202006-09-08T23:24:00.000-03:002006-09-08T23:25:05.540-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>Conquistar los mundos</strong></span><br /><br />¿Es necesario ser un buen receptor o un buen emisor?<br />¿Siendo uno se es lo otro?<br />¿Es el mensaje en sí mismo?<br />¿Es humanamente posible la conquista de los tres?<br />¿Significa la conquista lograr la excelencia en cada uno?<br />¿Sirven las conquistas en soledad?<br />¿Dependemos de otros?<br />¿So para satisfacer una arrogancia?<br />¿Ayudarían al transcurso de la vida?<br />¿Son el transcurso de la vida?<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1157768663449886442006-09-08T23:22:00.000-03:002006-09-08T23:24:23.466-03:00<p><span style="font-size:130%;"><strong>Trínamente Cuatro (¿12?)</strong></span><br /><br />Generalmente, para poder elegir caminos, dividimos el mundo que nos rodea (y a nosotros mismos) en tres partes fundamentales: los sentimientos, lo físico y lo inteligible.<br />Tratar de brindar un análisis racional a los sentimientos, a todo ese mundo lleno de contradicciones, paradojas, caprichos y demás, sería no sólo una pérdida de tiempo, sino una contradicción paradójica y caprichosa por demás. El mundo físico merecía un estudio y análisis propio y detallado, aunque no es la porción que tiene relación con este escrito.</p><p><br /><strong><span >Lo Inteligible.</span></strong><br />Talvez sea la parte más compleja de las tres, seguramente se podrías escribir cientos de googoles de libros tratando de analizarlo. Precisamente esto es lo que llamó mi atención al finalizar la lectura de una novela: el intelecto ¿por qué es influenciado? ¿Qué lo estimula?<br />Bien podríamos decir que los sentidos; pero ellos son terreno esencial de lo físico.<br />Dejemos completamente de lado las conexiones misteriosas y diotalévicas de los sentimientos.<br />¿Cuál es el medio puro y exclusivo de estimulación del intelecto? Los Libros.<br />Los Libros son prácticamente esencia intelectual materializada, lista para ser absorbida por cualquiera. Nada, ningún invento, ningún medio logra tan puramente como un libro alcanzar al intelecto. Dejemos las excepciones circunstanciales de lado, tales como el olor de un libro viejo, la tipografía, la semejanza con una experiencia emocional propia, el regalo de un ser querido, etc.<br />El poder del libro es tan grande que nos transmite gustos, imágenes, olores, colores, texturas, todo sin utilizar los sentidos.<br />El poder del libro es tan grande que nos transmite emociones, alegría y tristeza, risas y lágrimas, miedo y paranoia.<br /><br />¿Pueden el mundo físico, a través de los sentidos, y el mundo emocional, a través de las emociones, estimular recíprocamente al intelecto?<br />¿Reside el podes de los libros en el lenguaje?<br /><br /><em>locutus ergo cogito ergo sum.</em><br /><br />¿Es el lenguaje un medio para el intelecto, o todo lo contrario?<br />¿O son, acaso, lo mismo?<br /><br /><br />M.</p>M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1149504415882058352006-06-05T07:45:00.000-03:002006-06-06T01:19:51.133-03:00<p style="font-weight: bold;" class="MsoNormal"><span style="font-size:130%;"><span lang="ES-AR">Reivindicando la superficie.</span></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Trazando el movimiento cíclico de extremos que suele caracterizar a las modas, hoy en día la superficie de una persona parece desvalorizada por la gente que quiera considerarse un poco más inteligente que la masa. La premisa es seguir uno de aquellos saberes populares “lo de adentro es lo que importa”, o más comercialmente “la imagen no es nada[...]”. A todo esto surge la tendencia de despreciar la moda, la vestimenta, el cuidado y la atención de la propia estética, solo para poder reflejar en sociedad una mayor inteligencia, o una mejor “fachada” de la inteligencia anti-superficialista.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Secundo el planteo que tiene esta corriente que dice que la imagen, lo exterior no es todo lo que importa, y que es muy valioso lo interior, tanto emocional como intelectualmente. Pero me parece aberrante que se pierda la cordura y se opte por hacer sacrílego el cuidado de la apariencia.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Aquel movimiento de jóvenes intelectuales que querían desprenderse de todo lo terrenal y superficial para poder ser espiritualmente completos murió hace años. No fue en vano su paso, porque pudo concientizarnos con respecto a lo interior, pero tampoco en vano murió, y lo hizo para que pudiéramos, nosotros, aceptar ambas posturas, ambos campos de la existencia y poder fundirlos en uno. Desprendernos, todavía, de lo exterior, renegar de ello, y tomar a todo aquel que lo pondere como directamente alguien corto de mente, falto de inteligencia y posiblemente de sentimientos vacuos, es terriblemente estúpido.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">En absoluto puedo declararme a favor de la postura criticada por estos neo-hippies, y decir que debemos hacer culto del cuerpo, que lo más importante es lo exterior, y todo ese montón de sinsentidos extremistas.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Sin embargo, tampoco tolero que se sostenga aquella mentira que nuestros<span style=""> </span>predecesores tienen o tenían por verdad absoluta: nunca juzgues un libro por su portada. Lamentablemente para los crédulos, uno vive juzgando libros por sus portadas. Y no sólo hablo de libros, sino también de seres humanos, comidas, prendas, artefactos y casi todo lo que se les pueda ocurrir, lo juzgamos, al menos en una primera instancia, por su exterior. Vivimos constantemente definidos por lo que vemos y oímos, no podemos pretender que no utilicemos esos sentidos para poder juzgar, o sostener una primera y fuerte impresión de cualquier cosa o persona.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Desde un punto de vista más natural, podemos tomar como ejemplo los animales, insectos o cualquier criatura de la naturaleza para ver como se embelezan para poder, al menos en un primer intento, atraer lo que quieran atraer, para lo que deseen.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Los reto a que lo analicen, sobre todo a ustedes que se creen o sienten superiores por renegar de lo exterior para concentrarse y/o proclamarse superiores en lo interior. Desde su fuero más interno y sincero, saldrá esa necesidad por la armonía. Armonía que se da entre lo exterior y lo interior, nadie quiere un hermoso cerebro, sucio por fuera; ni una hermosa cáscara, sin nuez dentro.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p style="font-style: italic;" class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">Estoy cansado de los hipócritas, exteriores e interiores.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR">M.</span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span lang="ES-AR"><!--[if !supportEmptyParas]--> <!--[endif]--><o:p></o:p></span></p>M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1147682729427692872006-05-15T05:42:00.000-03:002006-05-15T06:03:01.403-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Le Miroir.</span></strong><br /><br /><br />Sentada en un sillón color mostaza, tenía un vestido negro, como su cabello recogido. Era ajustado de la cintura para arriba, con un escote sutil: ni muy provocativo ni muy puritano. El vestido se ensanchaba en la falda, ondulado, cayendo hasta los pies que no se veían. Era completamente negro salvo por unas rosas rojas, casi bordeaux, cerca de los pies, y por el forro blanco que asomaba entre los volados. Apenas perceptibles gracias a la caída del vestido, las piernas juntas, sin cruzar, se ladeaban hacia la derecha. Los brazos estaban al costado del cuerpo, la mano derecha se escondía detrás de la abultada falda y la izquierda reposaba gentilmente sobre las piernas. El cuello estaba limpio de alhajas, y servía como un noble y prístino soporte para un rostro serio. No había una sonrisa en su cara, pero tampoco enojo. Ni muy recia ni muy gentil, simplemente desafiante y arrogante. Signos de una estirpe agonizante.<br />Así posaba la joven para el pintor que la inmortalizaba, para quedar atrapada por años incontables dentro de un marco de oro, cuadrado, de metro y medio de largo.<br /><br />Sesenta años después, a la cabecera de una larga mesa en un comedor iluminado por una araña de mil cristales, una vieja con tantas historias de tantas ciudades de todo el mundo como arrugas en su cara atendía y dirigía una típica reunión familiar sin una cana visible en su cabeza. A su derecha había una puerta por la que aparecía una sirvienta siempre que ella pensase que alguien necesitaba algo. No era por arte de magia, pero así parecía. Milady oprimía un botón secreto en el suelo, que llamaba discreta y silenciosamente a la servidumbre.<br />Siempre se vestía como de fiesta para cenar. Y siempre antes de que sirvan la comida, tal vez durante, y seguro al final, junto con el café, fumaba con su boquilla negra de mas de 15cm unos cigarrillos completamente blancos y largos, Virginia Slim supongo.<br /><br />Diez o quince años más tarde, en un piso de la Avenida Alvear, se reunían varias decenas de personas. En una habitación, por la que todos pasaban en algún momento de su estadía en aquel enorme departamento, había un cuerpo reposando en el medio de la sala. Blanco su vestido, su pelo y su tez, así como también el interior de su última morada, forrada en seda. El rostro hundido, demacrado, así como los brazos finos y las manos con la piel casi envolviendo los huesos. No había una expresión en su rostro, ni un gesto en su cuerpo; simplemente era alguien durmiendo, tan indefenso, frágil y débil. No había nada glamoroso, ni nada repugnante, simplemente había un cuerpo inanimado. Esta escena, esta habitación, la observaba yo a través de una arcada enorme. Estaba viendo el ataúd de costado, casi un perfil perfecto, y no quería reparar mucho en el cuerpo cuando algo llamó mi entera atención. Un contraste increíble, que parecía hecho a propósito. Una especie de espejo del tiempo que se desarrollaba en aquella habitación y sólo pude verlo cuando ésta quedó casi vacía, salvo por una o dos personas. Sobre la pared que tenía frente a mi, por detrás del ataúd, al fondo de la habitación, había un marco de oro, cuadrado, de metro y medio de largo.<br /><br />Dos reflejos inanimados y opuestos de alguien que ya no estaba allí.<br /><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1146033792335972172006-04-26T03:38:00.000-03:002006-04-26T03:43:12.366-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>Misticismo pre-onírico.</strong></span><br /><br />Nunca pude dormirme rápido. Desde chico que, salvo excepciones de agotamiento, tardo alrededor de media hora en conciliar el sueño.<br />Desde hace años, ya casi una década, que tengo un pensamiento recurrente.<br />Sucede siempre en el momento antes de dormir. Estando ya acostado, con los ojos cerrados, preparado para dormir.<br />El pensamiento en sí mismo es bastante escueto y sencillo, pero es la sensación que me produce lo que no me deja dormir durante más de lo normal...<br />Los lineamientos del pensamiento son algo similar a lo siguiente:<br /><br />¿A qué hora me voy a levantar?<br /><em>A las 8. Son las 2, con lo que dormiré 6 horas.</em><br />Seis horas perdidas... ¿Qué pensaré cuando me despierte?<br /><em>No sé.</em><br />Digo, ¿Recordaré esto cuando me despierte?<br /><em>Lo dudo.</em><br />¿Y cuando me dormiré?<br /><em>A este paso nunca.</em><br />Pero, ¿Seré capaz de sentir justo el momento de entrar en mi sueño?<br /><em>No creo.</em><br />No entiendo, es un parpadeo...<br /><em>Sí, pero de 6 horas.<br /></em>¿Cómo será despertar?<br /><em>Dormite y averigualo.</em><br />Quiero sentir mientras duermo.<br /><em>Se llama soñar...</em><br />No, ser conciente, no soñar. Me gustaría verme mientras duermo.<br /><em>Filmate.</em><br />No. Verme a mi mismo, desde mi mismo.<br /><em>What?</em><br />¿Cómo será mañana?<br /><em>Como siempre.</em><br />Pero quiero que sea ahora.<br /><em>Dormite, es un parpadeo.</em><br />Pero tardo en dormir, quiero ahora saber como será mañana.<br /><em>Precognición... algo imposible.<br /></em>Ya sé, pero está tan cerca, es sólo un parpadeo.<br /><em>Hacélo.</em><br />No puedo, siempre tardo. Pero no es el punto.<br /><em>Sí lo es.</em><br />No, yo quiero saber ahora cómo me voy a levantar mañana.<br /><em>¿De buen humor?<br /></em>No. Las sensaciones. Siempre puedo recordar cuando me despierto, pero me es difícil recordar cuando me duermo. Quiero poder ser conciente durante mi sueño, para aprender cómo es el pasaje de un día al otro.<br /><em>Dormite y calláte.</em><br />Pero...<br /><em>Shh...</em><br /><br />Es en ese momento cuando la sensación que guía la conversación es indescriptible. Es el saberse a un mero paso del mañana, pero no poder darlo, ni poder mirarlo ni comprenderlo. Es como sentirse el huevo y la gallina al mismo tiempo.<br />Es una sensación tan rara, tan atrapante, tan poco lógica, que me hace sentir también que es un momento de cuasi iluminación. Gracias a la terrible paradoja en la que me sitúa esa sensación, siento un momento de ascensión Zen que me hace creer capaz de resolver cualquier cuestión. Pero fallo al querer traer alguna otra cuestión a mi mente porque estoy demasiado concentrado preguntándome por el mañana y el presente al mismo tiempo.<br />Es una especie de ciclo sin fin, que en algún momento cede ante el agotamiento mental y me deja parpadear y olvidar...<br /><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1143102823397240172006-03-23T05:30:00.000-03:002006-03-23T05:33:43.416-03:00<strong><span style="font-size:130%;">La Elección de la Belleza.</span></strong><br /><br /><br /><em>“El Fin justifica los Medios”<br />“Life’s a journey, not a destination”</em><br /><br />Basura.<br />Tienen su pequeño sentido, pero al tratar de analizar un todo, carecen de puntos fuertes. Dicen que <em>“la vida es un camino y que lo importante es recorrerlo”</em>, ¿acaso es posible que el Vox Populi esté tan errado? Sí.<br /><br />Fin, objetivo. Hay que encontrar uno, pero casi siempre, a menos que se padezca de alguna enfermedad psicológica, todos coincidimos que el fin de nuestro camino, es la Felicidad. Si podemos concebir como objetivo de nuestro todavía ignoto camino a la felicidad, entonces tenemos un Fin egoísta que se siempre se retroalimentará.<br /><br />Medio, camino, modus. Aquí es donde la mayoría se equivoca. Ésto no es lo importante, para lograr cualquier Fin, sea cual fuere, a cualquier nivel (aunque aquí estoy hablando de la Vida misma), tiene que haber un Medio, un Camino, un Modus Vivendi. Que exista y que tengamos que recorrerlo son condiciones obligatorias para poder Vivir y Finalizar la Vida, con la Felicidad. Sean puestos a un lado los débiles, que no podrán con los obstáculos en el Camino, que no sabrán superarse; los fuertes siempre caminarán, siempre seguirán, hasta alcanzar el Fin o Morir en el intento (así y todo, felices por serse fieles y nobles). Entonces, si el Fin es la Felicidad predeterminadamente, y el Camino es obligatorio de recorrer, y siempre lo caminaremos; ¿por qué creemos que son importantes estas dos condiciones impuestas e ineludibles de la Vida? Son así, aquí no hay libre albedrío, hay una no-opción que es la debilidad, la vagancia y la dejadez. Analicemos a aquellos fuertes, los otros no lo merecen.<br /><br />¿Dónde, entonces, está esa elección, esa importancia en vivir?<br />Pues tiene que existir en algún lugar. Si no existiera, sería sumamente aburrido y monótona nuestra vida, ya que serían todas acciones y reacciones en base a programaciones predeterminadas por la supervivencia y la permanencia en el tiempo.<br /><br /><br /><br /><strong>estético, ca.</strong> (Del gr. ασθητικς, sensible).<br />1. adj. Perteneciente o relativo a la estética.<br />2. adj. Perteneciente o relativo a la percepción o apreciación de la belleza.<br />3. adj. Artístico, de aspecto bello y elegante.<br />4. f. Ciencia que trata de la belleza y de la teoría fundamental y filosófica del arte.<br />5. f. Conjunto de elementos estilísticos y temáticos que caracterizan a un determinado autor o movimiento artístico.<br />6. f. Armonía y apariencia agradable a la vista, que tiene alguien o algo desde el punto de vista de la belleza. <br />7. f. Conjunto de técnicas y tratamientos utilizados para el embellecimiento del cuerpo.<br /><br /><br />La estética percibe la belleza, el arte, la elegancia. La estética es el tamquam, no el camino en sí, sino la forma de éste. Ése es el Sentido de la Vida: su gracia, su belleza.<br />Aquí sí existe el libre albedrío, pues no a todos nos causa placer lo mismo, y no se necesita mucha inteligencia para tender a hacer lo que cause placer. No respondemos al placer, lo buscamos. Imaginamos, pensamos, ignoramos, creemos, buscamos, sólo para poder obtener placer. Este placer, va a ser definido por nuestra relativa percepción de la belleza (aunque ésta siempre va a verse condicionada, en gran parte, por el entorno de maduración que tenga el individuo).<br /><br />Para poder recorrer el Camino, sea cual fuere, sea como fuere, debemos ser Egoístas.<br /><em>“No! No tendremos un desmedido amor propio y rayaremos con el narcisismo!”</em> dirán los tontos, aquellos que están condenados a intentos altruistas, con altas probabilidades de fracaso, o mejor dicho, autosabotaje.<br />¿Por qué?<br />Porque sólo aquellos que tengan paz y armonía en sí mismos, sólo aquellos íntegros, aquellos fuertes, pueden darse el lujo de ayudar al otro, por el simple placer de sentirse útil o bondadoso. Pero aquel que no se concentre en si mismo, que no mire primero hacia adentro, que no se entienda ni se conozca, fallará al tratar de ayudar a otro pues no conocerá cómo, ni tendrá referencia, ni tendrá la voluntad dada por la fuerza. Perderá por hacerse débil a sí mismo.<br />¡Nunca sean narcisistas! Ahí se perderán dentro de ustedes, y nunca saldrán para obtener el mayor placer del Camino, que será caminarlo con otros. Además, perderán la capacidad estética de apreciar la belleza fuera de sí mismos, lo cual deja un margen estrechísimo de belleza.<br /><br /><strong>La Belleza determinará un camino, la Voluntad nos hará caminar, y la Felicidad nos dirá que hemos llegado. Y Moriremos plenos.</strong><br /><br /><br /><em>Estereotipos, Límites, Conservadurismos: trabas de la Belleza, la Voluntad y la Felicidad.</em><br /><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1141372341935897742006-03-03T04:49:00.000-03:002006-03-03T04:59:45.506-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>Impotencia.</strong></span><br /><br />Condeno esta sensación, este sentimiento.<br />De todos aquellos sentimientos imaginables por el hombre, este es aquel que representa la suma de todos los miedos, este es aquel que nos priva de toda libertad, este es aquel que nos deja sin escapatoria, acorralados.<br />Contra la impotencia es muy difícil, casi imposible luchar. De hecho, si y sólo si, logramos atravesar ese momento en el que la desesperación nos invade, el único camino que podemos y debemos tomar es el que nos guíe a averiguar la causa, la raíz de nuestra falta de poder.<br />Pero si nos atascamos en la desesperación, o no podemos tampoco ver las causas, entonces estamos perdidos, completamente a la deriva, y la única salvación para nuestra patética situación es el milagro de la intervención de alguien externo, que por su propia iniciativa, bondad, causa o casualidad, nos guíe o libere. Pero debemos ser capaces de ser en nosotros mismos íntegros.<br /><br />Así, siguiendo un axioma viejo, <em>uno es dueño de algo sólo cuando tiene la capacidad de destruirlo</em>, podemos decir que para ser íntegros y dueños, tenemos que tener completo control de nuestros actos, y hasta sabernos capaces de nuestra destrucción. Recordemos que la capacidad de algo, no implica la realización de ese algo.<br />En cambio, si sufrimos impotencia ante un conflicto y no podemos o sabemos determinar la causa, aquello que nos esta destruyendo no es algo nuestro, no somos nosotros, es externo. Es algo similar a la angustia de Heidegger, que nos invade desde fuera; como el Pánico, que viene hacia nosotros y no podemos detener.<br /><em>Hasta que no podamos controlarnos, no seremos.<br />Hasta que no podamos destruirnos, no seremos.<br /></em><br />Encontrar la causa de nuestra impotencia es el peor trabajo que puede existir. Para poder ser sinceros en nuestra búsqueda, debemos estar completamente abiertos a analizar todo punto, todo recoveco, todo aljibe de nuestra persona. Debemos poder mirar sincera y objetiva y subjetivamente cada pozo de recuerdos en el que dejamos algo; debemos saber mirar nuestro ambiente y no hacer obvio lo obvio, debemos mirar a nuestros allegados y juzgar su utilidad, su funcionalidad, su participación.<br />Poder extraernos de nosotros mismos, y ser nuestros propios jueces, buscando fallas, buscando falencias, buscando tumores; no es algo sencillo. No estamos buscando esos defectos que hasta algunos se enorgullecen de llevar y mostrar como estandartes de la modesta imperfección aceptada. No. Aquí buscamos más allá, porque, precisamente, no sabemos qué es lo que buscamos. Todo debe padecer bajo nuestra lupa, y nuestra lupa debe ser siempre tan inquisidora como Gregorio IX.<br />Pocos pueden mirarse así, pero es la Voluntad de esos pocos lo que los hacen individuos sobresalientes en el mundo plebeyo, de voluntades achacadas.<br /><br />La impotencia es algo contra lo que todo ser humano, y no tanto, lucha en algún momento o varios de su vida. Pero sólo aquellos de fuerte Voluntad, aquellos que no escapan y no amedrentan, son capaces de vencer la impotencia, encontrando su causa y atacando la raíz.<br /><br />De todo lo que podemos sufrir a causa de la impotencia, no es la búsqueda exhaustiva de su origen lo peor. Ese momento en el que todavía no aceptamos nuestra impotencia como tal, ese tiempo en que no entendemos y no queremos entender; eso es lo peor de la impotencia.<br />Este momento puede durar horas, semanas, meses. A aquellos llenos de Hubris les digo: ¡Desesperen! . Para ustedes que no pueden tolerar la simple idea de una falla en sí mismos, ni siquiera como pauta para la maduración y la mayor perfección del ser, no hay esperanza. Pero si pueden tolerar, concebir esa idea de falla entonces tal vez tengan oportunidad de entender que hay algo que debe ser buscado.<br /><br /><em>¿Cómo puede uno encontrar algo que no sabe lo que es?</em><br />Siguiendo una simple y vana lógica lineal, es imposible o circunstancial. No acepto lo imposible, precisamente, y no tolero la esperanza en las circunstancias. Las soluciones se buscan, se hacen, se toman, se eligen.<br />Pero esta lógica simple no puede ser aplicada para analizar una pregunta tan compleja, tan paradójicamente exenta de Gödel. Nuestra mente, cuerpo, entorno, compañía nunca es simple; y nuestra impotencia radica en alguno de ellos, y afecta a alguno de ellos. Y no tienen por qué ser análogos.<br /><br /><em>¿Cómo puede uno encontrar algo que no sabe lo que es?</em><br />No puede, quiere. No espera, desea. No piensa, no siente, observa. No habla, escucha.<br />Sólo ellos con verdadera <em>Voluntad</em>, verdadera <em>Visión</em>, verdadero <em>Conocimiento</em>, verdadero <em>Dasein</em>, pueden triunfar.<br /><br /><em>Curiosidad: la fuerza motora de todas las grandes Voluntades.</em><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1140424005928280542006-02-20T05:16:00.000-03:002006-02-20T05:26:45.946-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>El Ansia</strong></span><br /><br /><em>¿Viste cuando te subís a una montaña rusa, y vas subiendo y no ves la bajada?<br /></em><br />He aquí un reto al Efecto Mariposa.<br />No importa la complejidad del hecho, ni que tan cerca esté nuestro horizonte de predicciones; aquí estamos tratando con una sensación que no da lugar a dudas. ¿Cuál sería el punto de estar ansioso por algo que es <em>simplemente probable</em> que suceda?<br />En una montaña rusa, cuando uno ya está sentado, no tiene escapatoria. Las trabas de los asientos no lo van a dejar saltar. No puede mirar para otro lado. Sabe lo que va a suceder. Pero no puede verlo hasta que es demasiado tarde.<br />Con el Ansia sucede lo mismo. Ansiamos que algo suceda, ansiamos hacer algo sólo cuando sabemos que lo vamos a realizar. Cuando está ahí, justo fuera del alcance de nuestros dedos, solo 5 centímetros mas allá. Talvez no sepamos lo que es, cómo es, cuánto es, pero sabemos que está ahí y vamos hacia él. Ninguna variación, grande o pequeña, en las condiciones iniciales o posteriores puede producir desviaciones a largo plazo.<br /><br />Otra de las características singulares del Ansia es su relación con nosotros. Es una de las pocas sensaciones con las que mantenemos una conexión amor/odio. Amamos lo que va a suceder y sentir ansia por ellos; pero Odiamos la espera inexpugnable. Odiamos lo que va a suceder, pero Amamos la espera porque es nuestra paz que vemos ansiosamente mermar. Queramos o no que suceda el hecho, el Ansia es amor/odio; pero sólo gracias a que el objetivo está oculto, fuera de nuestra visión, de nuestro alcance imaginativo. Si pudiésemos tener una visión <em>diáfana</em> del hecho, una imaginaria al menos, no amaríamos/odiaríamos la espera.<br /><br />Pero talvez el mayor poder del Ansia en nosotros es su capacidad de recurrencia. Todos solemos ocupar nuestra mente con tareas para no pensar en ciertas cosas. Pero escapar de aquello que ansiamos es mucho más difícil. El Ansia sabe que ocupamos la mente, que ahí estamos nosotros atrincherados y que no la dejaremos entrar. Es por eso que divide y vence, atacando el cuerpo: tensa las manos, las piernas, alborota el estómago, reseca la garganta, acelera el pulso. Y entonces perdemos. No somos capaces de controlar absolutamente todo lo que sucede y el Ansia se apodera nuevamente.<br /><br /><br /><em> Ansío la Envidia del Ansia para no Ansiar.</em><br /><em>¿Ansío la Envidia del Ansia para no Ansiar?</em><br /><br /><br /><br /> M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1140158314271438032006-02-17T03:37:00.000-03:002006-02-17T03:40:24.880-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Envidia.<br /></span></strong><br />La envidia es un sentimiento incomprendido, o al menos incompletamente conocido.<br />El común denominador de la gente se queda con la simple y patética primera acepción, la cual implica una tristeza, una angustia por algo que no se posee.<br />La acepción que me digno de utilizar es una sin estos matices negativos, que expresa el deseo por algo que no se tiene y que posee otro.<br />Siguiendo, le envidia entonces sirve como un motor generador de rumbos. Al sentir envidia por algo, sabemos que es lo que deseamos y entonces podemos dirigir nuestras acciones para conseguirlo.<br />Pero también es combustible. El deseo de obtener el objeto de la envida no termina hasta que lo tenemos. Mientras tengamos deseo, tenemos fuerza para continuar; y mientras más deseo tengamos, mas veloces seremos.<br /><br />La Envidia, entonces, es el sentimiento de admiración más elevado que existe. La admiración común, es el hecho de tener en singular estimación algo. Una contemplación, simplemente eso. Totalmente inactiva e inocua. En cambio, la Envidia mueve al sujeto que la siente, a perseguir lo que aquel envidiado le muestra. Por ende, entendemos que no sólo se tiene en singular estima el objeto, sino que nos movemos para tenerlo también. Es la demostración de la admiración llevada a su cenit.<br /><br />Envidio el Talento. No por carecer de éste, sino por talentos específicos que son demasiado difíciles de desarrollar, o imposibles. El dibujo es uno de ellos. La música es otro. Envidio a quienes pueden comunicar ideas sin palabras.<br /><br />Envidio el Dinero. Lamentablemente para todos aquellos idealistas, el Dinero es aquello que nos va permitir más comodidades, más lujos, más experiencias en nuestra sociedad global de capital. Envidio a quienes no les falta nunca.<br /><br />Envidio la Fe. En mi imposibilidad de creer en algo que me resulta completamente ridículo, envidio el sentimiento de paz que profesan sentir los creyentes. Trato de entenderlos, pero sus palabras ya dejan de tener sentido para los lógicos. ¿Son ilógicos porque la Fe es ilógica, o son ilógicos porque no saben expresarla?<br /><br />Pero si hay algo que puedo envidiar mucho más que todo esto, es la Memoria. Envidio aquellos que pueden recordar los mínimos detalles de una hoja hasta reconstruir el bosque entero. Esas personas merecen toda mi Envidia.<br /><br />Greed is good.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1139983012660481132006-02-15T02:53:00.000-03:002006-02-16T01:25:55.286-03:00<strong><span style="font-size:130%;">dios no valía la pena...</span></strong><br /><br />Ingenuidad. La suficiente como para no sospechar de nada ni nadie y para no entender señales.<br />Pánico. Ese tipo de pánico que nubla los sentidos, elimina la razón y nos deja sin curso de acción, sin palabras, como vegetales.<br /><br />Una combinación fatal. Pero estos ingredientes necesitan un solvente para reaccionar.<br /><br />Mediante la ingenuidad, uno no puede estar preparado para los golpes, todo revés dirigido a la mandíbula es imposible de avistar a tiempo. Pero claro, si uno tuviese reflejos, sería perfectamente capaz de agacharse, o cubrirse talvez a tiempo para amortiguar un poco...<br /><br />Solvente: “Sólo sé que no sé nada”.<br /><br />Supongamos que nos encontramos en un estado en el cual no sabemos qué queremos. No necesitamos saberlo inmediatamente, así que nos damos el lujo de relajarnos y vivir un poco en la corriente del Carpe Diem. En este estado las estructuras y los planeamientos se ven eliminados. Día a día vemos qué nos mueve y vamos construyendo nuevas estructuras a raíz de las experiencias. No saber nada es un increíble momento en el cual entendemos que no sabemos qué queremos, nos hacemos cargo y podemos continuar a partir de ello nuestra búsqueda.<br />El problema surge cuando combinamos este estado socrático con la Ingenuidad y recibimos un golpe. Los reflejos que tendríamos están entumecidos y no podemos reaccionar. Eliminamos nuestras estructuras, por ende no tenemos donde apoyarnos.<br />Y entonces, el desastre...<br /><br />Necesitamos hacer algo, pero no sabemos qué: pánico.<br /><br />Una vez que hemos sido golpeados, nos levantamos. El pánico va a continuar, si bien no por un golpe inminente, por la posibilidad de un golpe más adelante sumado al conocimiento de la imposibilidad de reacción. Sólo cuando nos damos cuenta que nuestro “estado socrático” es una estructura en sí mismo, podemos perder el pánico. Tenemos donde apoyarnos: no sabemos qué queremos, por eso tenemos la libertad de experimentar. No importa el golpe que nos impacte, lo absorberemos para tomarlo o no en consideración, dependiendo nuestros gustos preestablecidos y cambiantes.<br /><br />Ya no hay pánico, no tiene sentido.<br /><br /><br />El análisis racional de nuestras acciones nos puede servir para aprender a partir de nuestros errores.<br />“Si no te mata, te fortalece”: un excelente modus vivendi.<br /><br /><br />Theta.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1136883639608340582006-01-10T06:00:00.000-03:002006-01-10T09:05:26.600-03:00<strong><span style="font-size:130%;">El dolor crea poetas.</span></strong><br /><br /><em>“Todo lo que termina, termina mal”.<br /></em>Falso.<br /><em>“Todo lo que termina, termina mal para aquél que no haya querido terminarlo”.</em><br />Verdadero.<br /><br />Siempre creemos que este final de nuestra pareja, es un Final mayor a cualquier otro. No hacemos caso de la gente que nos dice “ya estuve ahí, todo pasa” o “no te preocupes, tiempo al tiempo”.<br />¿Cómo vas a haber estado acá si lo que siento es único? <em>No puedo imaginarme sin ella.<br /></em>¿Cómo me vas a decir que no me preocupe? <em>No puedo imaginarme sin ella.<br /></em><br />Pero pensémoslo. Muy en el fondo, atrás de esa enorme estaca de dolor que atraviesa nuestro corazón paralizándonos lo sabemos. Todo pasa. Seguimos adelante.<br /><em>El Mundo puede habernos pasado por encima sin que nadie pare</em>; pero nosotros continuamos.<br />El Vacío que se genera por la pérdida puede ser llenado de nuevo, si lo dejamos. Ante este dolor esencial surgen dos caminos: usar o no usar una Coraza. Yo creo que para poder definir nuestro curso de acción tenemos que hacernos la siguiente pregunta: ¿cómo soy más feliz?<br />¡Por supuesto que la pregunta es egoísta!<br />En este momento únicamente debemos preocuparnos por nosotros y nuestra felicidad. ¡Al diablo con el resto del mundo!¡Puede cuidarse sólo!<br /><br />La opción más fácil y rápida es escudar nuestro corazón detrás de una Coraza. Nunca más nos arriesgaremos a salir lastimados de esta forma. Seremos inmunes al dolor. Seremos estoicos. Podremos disfrutar de placeres carnales todo lo que queramos sin nunca quedar atrapados ni subyugados por el dolor.<br />Pero, ¿cuál es el precio? No sentir nunca más lo mismo por alguien.<br /><br />Decidir no usar esta Coraza es más difícil y lleva más tiempo. Dejamos abierta una puerta para poder volver a recibir a alguien tan o más especial que aquella quien nos hirió. Podremos conocer a esa mujer que llegue a convertirse en nuestra compañera de vida. Amaremos y seremos amados.<br />Todo tiene un precio: Podrán herirnos otra vez, y talvez peor que antes.<br /><br />No deseo ser malinterpretado. Al calificar un camino más fácil que el otro, o más rápido, no estoy emitiendo juicios de valor. Los dos son igualmente válidos si la elección se realiza respondiendo la pregunta desde el fuero más interno de la sinceridad. Si es otra causa la que impulsa la decisión, como el miedo, entonces la elección queda sin valor en absoluto. No habría felicidad y el precio sería demasiado alto; y demasiado es peyorativo.<br /><br />Como nota final me permito cierta ironía. El dolor es algo inevitable a sentir en estos casos, pero es curioso cómo decidimos enfrentarlo con cierta hidalguería romántica.<br />El dolor crea poetas.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1136533411248961592006-01-06T04:43:00.000-03:002006-01-06T04:43:31.263-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>Ráclima hijo de Sáclima y Sadinoel hijo de Radinoel.</strong></span><br /><br />Hace tiempo hubo una idea. Pero más que una idea fue una promesa.<br /><br />Cuando años atrás todavía era un dios menor, a la fuerza y por la fatalidad del destino, empecé a dirigir mi curiosidad innata hacia los libros. Pero no cualquier libro. Aquellos libros que podrían conducirme hacia el Olimpo, hacia Oiolossë.<br />La necesidad de un nuevo y mejorado dios no tardó en presentarse, y me creí dispuesto a tomar el lugar de aquellos que estuvieron antes. De ellos tomé costumbres, ideas, poderes, placeres, trampas, vicios; todo con la intención de mejorarlo y así pensé que fue.<br />Pero los mortales mueren, se pierden y flaquean. Y para qué hay dioses si no es para recompensar, asustar, dirigir, molestar, encauzar mortales. Entonces hubo caos y los dioses se separaron de los mortales.<br />El Olimpo era Caos. Había dioses que se retiraban a Dormir el Largo Sueño, dioses que huían al ver mortales queriendo ascender, mortales que lograban llegar a la cima y morían al no poder sostenerse como dioses, mortales huyendo.<br />Pero de todos los mortales, hubo uno que llamó mi atención. Aquél todavía conservaba la antigua Fe, las viejas costumbres y doctrinas. No fue lástima ni piedad el motivo de mi aparición ante aquél mortal. Fue la previsión, fue la certeza y la Visión Futura.<br />Aquel pequeño e insignificante humano se vio obnubilado por mi presencia, atraído por mis palabras e historias, por mis juegos y acertijos. Este humano consagraba y deificaba la curiosidad, así como yo era eso en esencia.<br />Varios Días y Noches pasé junto a ese mortal, y él escuchó. Entendió mis palabras lo mejor que un mortal puede hacerlo y siguió mis pasos de la misma manera. Pero entonces recordé el Olimpo.<br />El Caos había retrocedido. Las Mareas del Tiempo volvieron a su cauce normal y algunos de los Antiguos quisieron regresar de su letargo.<br />Ellos habían huido a tierras lejanas, o estuvieron durmiendo. Ninguno salvo Yo siguió incrementando poder. Y a veces, aunque sea por un simple y mero mortal, uno puede hacer la diferencia. No les permití volver.<br />Aquel mortal que escuchó mis Palabras durante los Tiempos del Caos también se retiró a sus asuntos cuando Yo volví mis pensamientos hacia Oiolossë. Pero sus asuntos eran los míos también, puesto que expandió sus conocimientos, sus historias. Mis conocimientos, Mis historias.<br />Fue entonces cuando supe que había obrado bien, y aquel mortal volvió a mi con más mortales. Todos ellos se entregaron a mis palabras e historias, a mis juegos y acertijos. Y ya ningún otro dios osaba poner en duda mi superioridad.<br />Con aquel Primer mortal, vino otro que llamó mi atención. Él no glorificaba mi curiosidad, ni mis palabras. Él glorificaba la pasión con la que satisfacía mis necesidades y aquello me interesó. Se convirtieron entonces en Dos mis mortales favorecidos, y ellos fueron entonces los encargados de recibir mi palabra y expandirla.<br />Entonces hubo Paz, por un tiempo.<br />Aquel Segundo mortal me traicionó, pero sin saberlo. Su intención fue buena, pero como mortal no supo ver más allá del presente y eso fue mi caída. Él venía de tierras lejanas, donde había conocido otras historias que hablaban de otros dioses, y así los Despertó. Eran dos.<br />Vinieron y pidieron mi hospitalidad y la de mis fieles. Aquel Segundo mortal convenció al Primero, y ambos quisieron que Yo acepte el pedido. Y acepté.<br />Esos dos eran dioses antiguos de un pueblo olvidad y deshecho, perdido y en guerra con sí mismo. Uno de ellos quiso hablar a Mis mortales, quiso mostrarles los juegos e historias de su pueblo, y así lo permití; pues Yo también sentía la curiosidad de saber que conocimiento había tan lejos de mi Eä.<br />Entonces aquel huésped usurpó mi lugar y me despojó de mi Olimpo. Hizo de su mano derecha a su compañero y también lo despojó de sus Poderes. Comenzó entonces a hablarnos a todos y a engañarnos con falsas promesas que jamás serían cumplidas. Contó historias que nunca terminaban, para que nunca dejáramos de oírlo. Pero Yo había sido un dios; y su poder no duró tanto conmigo. Yo había sido el Único Inmortal de mis tierras y mi poder era grande. El usurpador no pudo ver mas allá de su ego, de sus canciones y acertijos, y fue entonces cuando empecé a hablarles Yo de nuevo a aquellos Dos mortales. Y ellos escucharon.<br />Escucharon porque si bien tal vez menos adornada, menos colorida, Mi palabra era más profunda y llegó en su tiempo a los corazones de los mortales para grabarles a fuego mi Nombre. Y entonces, con esa Llama interna brotando chispas y luz otra vez, acometimos contra el Usurpador y él cayó del Olimpo. Mi Olimpo.<br />Pero no lo exilié entonces. La pasión y la curiosidad eran en mi esencias, pero entonces se sumo una tercera, la piedad. Aquellos dos dioses venidos desde lejos quedaron reducidos a mortales. Y en aquel lugar, mi Dos eran los más fuertes y los más sabios.<br />Entonces volví a contar historias y cuentos, volví a los juegos y acertijos. Y aquellos dioses caídos se quedaron y escucharon.<br />Pero ellos también habían sido dioses antes y mis palabras fueron trastocadas por ellos. Empezaron a corromper mi Eä desde su interior, y empezaron a trastocar los corazones y las mentes de mis Dos. Pero Yo fui más inteligente que ellos, y les hablé a solas a mis Dos mortales. Les conté cuáles eran los planes de esos caídos y ellos escucharon. Luego, mis Dos y Yo emprendimos una batalla que duró poco. Los expulsamos.<br />No hubo necesidad de desperdiciar sus vidas, ni la vida de nadie; pues cuando esos dos dioses caídos vieron el estandarte de batalla en lo alto, huyeron sin oponer resistencia.<br />Así volvió la Paz que hasta ahora hay en el Mundo.<br />Pero Yo estoy cansado. Necesito de nuevo descansar y acudir a mis libros. Necesito tener más historias y acertijos y canciones y juegos. Pero no hay otro para que pudiera recompensar, asustar, dirigir, molestar y encauzar mortales.<br />Fue en ese momento cuándo llamé a mis Dos mortales predilectos y les ofrecí la oportunidad de ser Dioses. Sólo uno de ellos podría subir a Mi Olimpo y reemplazarme, y sólo hasta que Yo quisiera volver. El Segundo quiso mi Lugar, y al Primero le pareció bueno. Entonces le di mis Poderes a él, y me volví mortal.<br />Así fue como les demostré mi confianza y así es como pongo a prueba su lealtad. Porque todavía no ha llegado el tiempo en el cual debo volver a Oiolossë. Todavía soy mortal, y todavía leo mis libros Olímpicos.<br /><br />Hace tiempo hubo una idea. Pero más que una idea fue una promesa.<br />Y es esa promesa la que ahora quiero cumplir. Por esa promesa es por la que leo mis libros y estudio mis canciones. Invento acertijos y juego mis juegos. Para que a ellos Dos, Mis Dos, les pueda dar lo prometido hace tiempo.<br />Porque puede no estar lejos ya, el tiempo en el que vuelva a Mi Olimpo...<br /><br />“En el principio estaba Eru, el Único, que en Arda es llamado Ilúvatar...”<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1135321941385415072005-12-23T04:10:00.000-03:002005-12-28T02:38:00.506-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Pérdidas y Separaciones</span></strong><br /><br />No.<br />La negativa con la que comienzo es cuasi-falsa. Esto quiere decir que no voy a hablar de los noviazgos en el primer sentido que cualquiera puede pensar. No voy a lloriquear, y quejarme románticamente sobre las relaciones humanas y sobre la imposibilidad del hombre para comprender a la mujer. Eso será otro escrito.<br />Sin embargo, voy a hablar de noviazgos, y es curioso que el escrito comience con una negativa, pues es ese lado, el negativo, del cual quiero hablar. (Noten por favor, que hablaré de lo negativo de un noviazgo mientras dura, no de la conocida negatividad para el o la protagonista del noviazgo una vez éste termina.)<br /><br />La absorción que produce el enamoramiento y una relación nueva es increíble. Increíble sí, pero en un primer momento justificada. Dos personas se conocen, se besan, se enamoran. Entonces deciden que quieren compartir al menos un período de sus vidas, y se dan cuenta que no se conocen realmente. Quieren pasar tiempo juntos conociéndose, aprendiendo cómo es el otro en distintas situaciones, y por supuesto, disfrutando de su compañía. Pero, ¿cuánto es justificable de la absorción en una pareja?<br /><br />El cambio que produce en el comportamiento de una persona el hecho de estar en pareja, también es notable. Deciden, por propia voluntad, quedarse en su casa esperando un llamado telefónico, no salir por la noche para no preocupar o molestar a su pareja, y demás. Pero, ¿cuánto es tolerable del sacrificio de cosas en una pareja?<br /><br />Estas dos preguntas tienen la misma respuesta, la cual sólo varía dependiendo a quién le sea hecha. Si se lo preguntamos a algún miembro de la pareja, responderá seguramente que “mucho”; pero si se lo preguntamos a las personas en sus respectivos vínculos sociales, dirán que “poco”.<br /><br />¿Por qué la diferencia?<br />Simple. Porque si en verdad en la pareja se puede encontrar una persona con la cual compartir todo, entonces los miembros de tal, no sienten nunca la falta de nada, a menos que falte el otro. En cambio, los grupos sociales siempre notan la falta de cualquier cosa. Y también la presencia.<br /><br />La pareja vive obnubilada por su propia luz, el grupo social ve siempre con claridad y juicio crítico. Esto es una realidad que las parejas no toleran, ni comparten, y hasta incluso les parece despótico y sin fundamentos. (Lo más curioso, o lamentable, es que cuando la pareja se disuelve, los miembros aceptan esta realidad.)<br /><br />Más allá del análisis, y de la capacidad de poder interpretarlo correctamente, seguimos perdiendo personas en el camino, seguimos separándonos de aquellos que caen en las férreas y suaves garras de “la pareja”.<br /><br />¿Cómo hacer para que aquellos que se dejan llevar por esa voz seductora comprendan que pueden no perder ni sacrificar nada y al mismo tiempo estar en pareja?<br />Imposible.<br />Lamentable, pero no hay manera de lograr este objetivo. No hay frase, golpe, razón que pueda esclarecer los pensamientos del emparejado. Él tiene que darse cuenta que pierde amigos, hermanos. Tiene que ver que los sacrifica innecesariamente en pos de la pareja.<br />Aquellos que estamos fuera de la pareja, nada podemos hacer. Sólo miramos impotentes. Pero, ¿y qué tal si le diésemos a aquel emparejado un golpe tan fuerte, tan duro, tan violento en su corazón, en su mente, en su sien, que todo su mundo se tambalee?¿lograríamos con eso que vea por un instante lo que hizo y que tome medidas al respecto?<br /><br />No.<br />La expresión es “backfire”. Si hacemos eso, entonces él se preguntará por qué es que sus amigos lo hieren, por qué no están felices por él, por qué no lo comprenden. No sólo no lograríamos el objetivo deseado, sino que empeoraríamos la relación. Pasaríamos de una incomunicación, a una incomunicación hiriente.<br /><br />No. (¡cuántas negativas!)<br />Sólo podemos mirar impotentes.<br /><br /><strong>Reencuentros.</strong><br /><br />Sí. A veces, algunos sin haberse deshecho de la pareja, miran a su alrededor y logran ver sacrificios en vano. Ellos a veces logran recuperar sus vínculos, sus amigos, sus hermanos.<br /><br /><br /><strong>Pero ¿cuánto tiempo, cuánto olvido hasta el punto sin retorno?<br />...<br /><br />¿Qué pasará con aquellos que intenten volver, una vez pasado ese punto?<br />...<br /><br />¿Qué tanto comparte un grupo de personas con aquella que hace tiempo se fue?<br />...<br /><br />¿Qué tan feliz estaría el grupo que sepa que aquella oveja descarriada vuelve?<br />...</strong><br /><br /><br />Espero, <strong>GJZ</strong>, que no averigües esas respuestas.<br /><br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1134979782288581032005-12-19T04:48:00.000-03:002005-12-28T02:40:21.373-03:00<p><strong><span style="font-size:130%;">Hacia el olvido</span></strong></p><p>Hace ya meses del envío de la sigueinte misiva, pero creo que la personas mencionadas al final de la misma (si bien no creo que frecuenten este espacio) merecen como mínimo una inserción aquí. No es por su mérito que decido esto, si no por su existencia. Que su paso nos sirva a los que quedamos para comprender que no podemos cambiar a las personas a nuestra voluntad. Podemos jugar con ellas, hacerlas dudar, podemos inculcarles pequeñas muletillas o frases, hasta podemos enseñarles algunas palabras; pero nunca podremos cambiar su escencia. Y fue la escencia de estos sujetos, lo que al no poder cambiar, no pudimos tolerar.</p><p>Muerte a la esperanza, pues nos hizo perder un año.</p><p>E-Mail enviado a todo el grupo:</p><p><em>Bienvenidos a todos a lo que espero que sea mi útlimo mail a todas estas direcciones.</em></p><p><em>hace una semana (o más), se había pautado por este mismo medio, una reunión general en San Carlos. la reunión estaba estipulada para el martes 8 de noviembre, a las 19hs. todos, salvo leo, acusaron revisar los mails todos los días de la semana o su mayoría. por ende, se esperaba contar con una asistencia completa. </em></p><p><em>la razón real de dicha reunión, enmascarada en un manto de inconsistencia con las palabras "poner nuestros asuntos al día", es lo que yo me propongo hacer en este mail. pero no sin antes aclarar ciertas cosas a todos los lectores. </em></p><p><em>desde un primer momento se plantearon varias cosas, varios códigos con respecto al manejo del grupo. una de las tantas, que esperaba tácita en toda relación humana, es el hecho de "ir de frente", "poner la cara". como bien todos podrán saber, siempre tenemos el estandarte en alto y tratamos de manejar todo de ésta manera. ya sea hablado antes o después de una sesión, o café por medio en algún bar. pero por falta de concurrencia, falta de tiempo, falta de organización, falta de disponibilidad, falta de muchas cosas, me veo obligado a recurrir al e-mail. bien saben todos mi opinión al respecto de este medio para tratar asuntos serios o problemáticos, pero dado que es mi último recurso, aquí está la intentona. </em></p><p><em>antes déjenme recalcar mi repudio a este medio, al cual gabo y mariano son tan afines, para tratar discordias, peleas y demases; como nos lo han demostrado empíricamente y por historias. espero haber captado su atención, y podido poner el "tono" que este mail necesita.<br /></em></p><p><em>estoy cansado. cansado de haber llegado en un 90% de las veces temprano y tenido que esperarlos. odié que casi nunca se disculpen por la tardanza o llamen para avisar que pasó algo. no puedo tenerle respeto a alguien que me deja plantado varias veces y no muestra una pizca de arrepentimiento. estoy cansado de esperar tanto para jugar rol, sólo porque el master de turno no se preparó para cuando debería haberlo hecho. </em></p><p><em>estoy aburrido. aburrido de jugar rol con personas que no me entienden y que yo no puedo comprender. aburrido de su dirección y su roleo, si es que existe. no puedo jugar un juego, con gente que no me divierte, ni se divierte con mis formas. necesito un mínimo de entendimiento mudo para poder congeniar, un mínimo de conexión para poder reir, y un mínimo de risa para poder jugar. </em></p><p><em>estoy decepcionado. porque puse mucho tiempo y ganas en producir un cambio, pero nunca llegó. quise tratar una fusión de estilos, una adaptación para la evolución; pero me di cuenta que hubiese sido involuciónar. </em></p><p><em>estoy intolerante. no puedo tolerar la xenofobia, ni el capricho constante. tampoco el mutismo ni los grises constantes. no tolero que con aquellos con los que quiero jugar, no pueda mantener una conversación ni reunirme en un café. no puedo tolerar separar un juego tan personal y complejo como es el rol, de una amistad o un nivel de respeto y entendimiento.<br /></em></p><p><em>por esto y más razones que ahora no acuden a mi mente, es por lo que les digo, gabo y mariano, que no quiero jugar más rol con ustedes. quise hacer lo correcto. quise plantear todo de frente. pero nunca aparecieron. allá ustedes, saben lidiar con un mail de este calibre.<br /></em></p><p><em>sin más. sin rencores, sólo con falta de entendimiento y semejanza.<br /></em></p><p><em>marto.</em> </p><br /><br />Para que puedan comprender, permítanme acercarles las respuestas que recibí.<br /><br />Transcripción del e-mail del Sr. G.:<br /><br /><em>"La verdad, no entiendo puesto q salta este monton de cosas y me agarra por sorpresa, y dicen esten monton de cosas, cuando nunca pegaron un llamado para ver como andaba todo... pero bueno, como ustedes digan, igual asi, toy medio perdido."</em><br /><br />Deja mucho que desear... demasiado.<br /><br />Transcripción del e-mail del Sr. M.:<br /><br /><em>"Disculpen si estuve muy alejado pero el miercoles fallecio mi Abuela, que mas que Abuela es una MADRE!!!! No hay prblema con el rol, los cinco no vamos a jugar mas, entiendo sus posiciones y me parece tambien una cagada el comunicarse por este medio, pero tiempo no hay, cuidense y que les vaya muy bien en todas sus cosas, tienen mi mail, numero de telefono y celular para lo que neseciten, los quiero mucho y espero que todos les vaya muy bien!!!!! MARIANO"</em><br /><em></em><br />Si bien un poco mejr que el anterior, no se dejen engañar por ese sentimiento que puede surgir a raíz de la perdida del sujeto. No es por desmerecerla, en absoluto, si no para dejar sentado que los problemas en Mi misiva eran anteriores a esto, y el envío de la misma igual. No debe haber mayor tolerancia ni nuevas expectativas por alguien que fue de una manera durante largo tiempo, sólo porque sufrió una perdida.<br /><br /><br />Este fue el final, merecido y gratificante final, de otra de las épocas del juego que juego jugando y a veces no tanto. Si pudiese arbitrariamente, como siempre, darle un nombre, sería el fin de la Época Oscura de la mesa.<br /><br />Tal vez, sólo tal vez, entremos ahora en un Iluminismo.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1132558163758887632005-11-21T04:23:00.000-03:002005-12-28T02:41:21.870-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>¿Evolución o Involución en el rol?</strong></span><br /><br />En el día domingo 20 del corriente, estuve de visita en la nueva "casa del pueblo". En éste lugar (que debería tener un graffiti a stencil de un puma), estaba en medio de una conversación con un colega sobre alguna trivialidad, y en uno de esos momentos dije una frase que ya había sido dicha muchas veces por muchas bocas. Nunca sabremos por qué, pero esta vez, quedó resonando en mi cabeza.<br />Como ya es costumbre, uno atiende estas cuestiones trascendentales en ciertos momentos. No se puede pensar profundamente siempre. Algunos necesitan estupefacientes, algunos cierto tipo de música, otros estar sentados en un asiento de cerámica blanca. Yo necesito descolocarme un poco de lo que esté haciendo para que las ideas del día invadan mis pensamientos. Un sólo minuto de ocio, y todo se resume en mi mente. Si hay alguna relación entre los problemas existenciales de turno, entonces se genera una idea; si no, probablemente nunca vuelvan a asomarse en la vida. Cosas que pasan.<br />Para ir rumbeando hacia el núcleo del asunto, estaba fumando en la puerta del dock en puerto madero, cuando la frase surgió de la nada en mi mente: "nuestro juego evolucionó mucho desde ése tiempo".<br />Déjenme situarlos.<br />Hablando de rol, estábamos haciendo una retrospectiva superficial acerca de los masters y los juegos. Recordabamos los comienzos con M.E.R.P. y Rolemaster, siguiendo con WoD en DarkAges, para dar paso a mi dirección de varios juegos. Por qué se hacia este flashback, no lo puedo recordar (ni lo necesito), pero el comentario vago y al pasar fue ese dicho entre comillas anteriormente.<br /><br />¿Es cierto que evolucionamos?<br /><br />Evolución: (Del lat. evolutĭo, -ōnis).<br />1. f. Acción y efecto de evolucionar.<br />2. f. Desarrollo de las cosas o de los organismos, por medio del cual pasan gradualmente de un estado a otro.<br />3. f. evolución biológica.<br />4. f. Movimiento de una persona, animal o cosa que se desplaza describiendo líneas curvas. U. m. en pl.<br />5. f. Movimiento que hacen las tropas o los buques, pasando de unas formaciones a otras para atacar al enemigo o defenderse de él.<br />6. f. Mudanza de conducta, de propósito o de actitud.<br />7. f. Desarrollo o transformación de las ideas o de las teorías.<br />8. f. Cambio de forma.<br />9. f. Fil. Doctrina que explica todos los fenómenos, cósmicos, físicos y mentales, por transformaciones sucesivas de una sola realidad primera, sometida a perpetuo movimiento intrínseco, en cuya virtud pasa de lo simple y homogéneo a lo compuesto y heterogéneo.<br /><br />Es cierto que en ningún lugar de la definición se dan connotaciónes morales, pero en el sentido figurativo que solemos darle a esta palabra, podemos definirla como "hacia adelante", "progreso", o incluso "mejora", y no simplemente "cambio".Tampoco en la siguiente definición se otorgan cargas morales, pero por ser el evidente antónimo etimológico de la anterior, se supone "hacia atrás", "retroceso", o incluso "deterioro".<br /><br />Involución: (Del lat. involutĭo, -ōnis, acción de envolver).<br />1. f. Acción y efecto de involucionar.<br />2. f. Detención y retroceso de una evolución biológica, política, cultural, económica, etc.<br /><br />Después de este breve analisis, puedo decir que si ya todos entienden a lo que hice referencia en la frase "nuestro juego evolucionó mucho desde ése tiempo", puedo decirles que es mentira.<br />La frase estaría apelando a que nuestro juego haya mejorado, y esto no es cierto. En el actual estado del juego, ya hasta la escencia esta en una gamma diferente.<br /><br />- Primero tiempos<br />El juego era encarado y llevado de una manera radicalmente distinta a la de ahora. Es de mi opinión que la chispa de la creatividad ha cambiado de lugar.En el primer Rol, un master de turno planteaba un acertijo o una batalla a un "grupo desvinculado" de personajes. Cada uno se concentraba en su potencial fáctico y en la mejor implementación de eso para la resolución del conflicto. Los mejores eran capaces de unir varias capacidades de distintos personajes, para lograr efectos increíbles (e inesperados para el master).<br />Un jugador pensaba en un personaje en base a las habilidades del mismo. Incluso entre sesión y sesión, uno pensaba en la mejor manera de utilizar estas habilidades, la manera más creativa y efectiva al mismo tiempo. Tratabamos de resovler conflictos para aumentar las habilidades y poder llegar a esos monstruosos combos de creatividad desenfrenada, que surgían cuando el personaje había crecido notablemente. La rueda de creatividad era exponencial y se le dedicaba mucho tiempo.<br />Mientras tanto, el master no tenía mucho trabajo intelectual a realizar. Con una idea simple de un conflicto, el objetivo era poner a prueba la capacidad de resolución creativa de los personajes, y solamente eso. Tenía que estar profundamente familiarizado con las reglas, y tener una inventiva técnica elocuente.Teníamos un grupo de creativos y una computadora humana.El roleo se basaba en unas cuantas charlas entre los personajes, dejando ver el estilo de cada uno, un par de risas y nada más.<br /><br />- Acutalmente<br />Hoy en día, la verdadera chispa de creatividad, está completamente absorbida por el master. Nadie tiene necesidad de creatividad salvo él.<br />Ya no importan las capacidades del personaje. Muchas veces, hasta se hace la vista gorda sobre cosas que faltan, en "beneficio del juego".<br />En este nuevo Rol, la participación de los jugadores es puramente dramática. No hay creatividad en el uso de las habilidades, ni la combinación entre los personajes. No importan esos detalles.En el presente, un jugador se centra en el crecimietno de su personaje en el nivel psicológico. Tiene que tener una razón para ser como es, un background más solido, más profundo (y mientras más intrincado mejor). Debe crecer en el juego, mediante la relación con los otros personajes o los PNJs. La actuación, la solidez y madurez en la sesión, son los principales dadores de experiencia, que nos va a servir, para seguir siempre justificando los pensares e ideas de nuestro PJ. Cada vez son menos los dados que ruedan, y más los lapices que anotan nombres, mensajes, mapas, ideas.<br />El master es quien ahora tiene un trabajo arduo y agotador. No sólo debe estar a la par de los jugadores en cuanto a las actuaciónes de los PNJs, sino que debe mantener una trama narrativa. No puede ser un acertijo simple, sino un intricado proceso de descubirmiento, y hasta iluminación existencial. Los personajes serán cautivados por lo personal que se vuelva las historia, con sus golpes bajos y sus recompensas. Ya no es ménester tener una espada indestrucitble-rompetodo, es mejor tener la vieja y herrumbrosa espada de tu padre, un granjero que murió defendiendo sus tierras de los zombies, salvando así a su hijo (cosa que justifica la incersion del personaje dentro de alguna de las ordenes caza-demonios).El master tiene que crear mundos, con políticas, economías, geografías, enredos, engaños, amores, posibilidades. Y todo esto, sólo para poder sentirse relajado ante los neo-jugadores, que hablan más de lo que actúan.<br />La creatividad la tiene el master. Los jugadores tienen su cuota al inventar la historia del personaje, pero una vez en juego, son actores, tratando de insertarse en una psyque que esperan les resulte entretenida.<br /><br />Si consideramos el juego como un elemento de desarrollo creativo, entonces a involucionado para todos, salvo el master, quien se lo lleva todo.<br />Si lo consideramos como un medio de desarrollo protagónico, de improvisación teatral, entonces pobre del master de turno, se lleva la peor parte.<br /><br /><br />En cambio, si no es lo uno ni lo otro, y es un encuentro dónde divertirse mientras suceden cosas en un imaginario semi-colectivo, tal vez estemos en el mismo lugar de siempre.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1127454964112992082005-09-23T02:49:00.000-03:002005-12-28T02:45:50.310-03:00<strong><span style="font-size:130%;">El Juego<br /></span></strong><br />Tengo un trabajo nocturno, en el cual puedo salir a fumar un dromedárico de vez en cuando. Esta noche salí a las cuatro de la mañana y vi la Luna. No piensen que voy a ponerme meloso y cursi para describir una poesía o un amor. Simplemente, la Luna inició una ráfaga de pensamientos conéxos por un hilo nanométrico, terminando en el juego en sí mismo. Terminé de intoxicar mis pulmones y me dirijí perturbado a mi cubículo, pasando antes por la bendita máquina que me regala café, para preguntarle a mi compañera de trabajo sobre el asunto.<br /><br />Pausa.<br /><br />Ella estudia Comunicación Social, una carrera donde se lavan completamente los cerebros de los estudiantes para poder lavarle el cerebro a la gente. Media aniñada, con un repertorio increíble de moralejas simpsonianas, rubia cuando quiere, morocha para defenderse, pelirroja para atacar, llevándose puesto al mundo sin darse cuenta. Y asi está, a medio lavar, entre desamores y amores, en sus 26.<br /><br />Play.<br /><br />¿Cúando fue la última vez que jugaste?<br /><em>Hoy. Siempre juego, salto las líneas de las baldozas, por ejemplo.<br /></em>Ok, pero ¿cúando jugaste con alguien por última vez?<br /><em>Hace un mes, jugué Carrera de Mente.</em><br />¿Y antes que eso?<br /><em>Puff, hará un año, El juego de la vida... pero a mí me encanta jugar, si fuese por mí jugaría un "juego de caja" todos los días, pero no tengo tiempo.<br /></em><br />Déjenme sacar algo de mi garganta primero: ¿quién puede ser tan inmoral y vulgar como para llamarlos "juegos de caja"? Pero claro, dentro del currículum que les facilité, no les dije que la pobre cabecita negra que obtuve por compañera es de Flores. Creo que eso puede aclarar la situación.<br /><br />Saliendo de aquella liberación opinionística sin importancia, quiero ir al meollo del asunto: el Juego.<br />No pretendo analizar el juego, ya que eso sería tarea de un juególogo o recreólogo. Tampoco contar mí trayectoria con respecto a él. Sino, plantear la interrogante ¿cúando dejamos de jugar?<br /><br />La mente de su anfitrión (sí, anfitrión), ya descartó el por qué, ya entendí que eso sucede por la falta de tiempo o de compañeros de juego. Comprendí que un analisis más profundo, ameritaría la ayuda del sr. Letalidad, estudioso de la Recreología. Pero como no necesito ( o no quiero necesitar ) la ayuda de nadie, encaro otra cuestión. El cuándo. Entonces ¿cuándo dejamos de jugar?<br /><br />Ninguna persona puede decirme que deja de jugar (a cualquier cosa, hablo del juego mismo) porque así lo desea. Bien puede dejar de jugar a la "mancha" cuando tiene 15 años, pero nacen otros juegos, tanto "de caja" (¡qué cómico!), como de cualquier otra índole. Pero nadie deja de jugar porque madura, porque ya está grande para los juegos, porque no quiere, porque no le gustan. Y si alguien es capaz de eso, entonces por favor, sáquenlo de su miseria y mátenlo al pobre animal.<br /><br />Puede lograrse diversión conversando y tomando infusión de yerba (la que elijan). Pero eso no implica ninguna competencia ni enfrentamiento lúdico. Se puede jugar a "saltar las líneas de las baldozas", pero carece de dificultad y competencia (aunque Yo tengo la teoría que mi compañera ha perdido varias veces en ese juego). Podemos enfrentarnos a la Máquina Pensante que todos tenemos en nuestro hogar o casa, pero ¿no se vuelve mucho más satisfactoria la experiencia, cuando se está eliminando del juego a un amigo?<br />Somos animales competitivos, naturalmente competimos desde que nacemos. Creo que en algun momento de la vida, la competencia se vuelve tan abrumadora en el sentido real, que ya no podemos disfrutarla como entretenimiento. Escapamos a la competencia, para ir a un nivel horizontal, donde conversando nadie gana ni pierde. Tenemos miedo de perder porque nos reflejaría que en nuestra vida y competencias reales también perderíamos. Nos mostraría la realidad, la posibilidad de perder y eso nos asusta. Más aún en una sociedad tan competitiva como la que forjaron nuestros "elders".<br /><br />¡Sea!¡Asústense!¡Corran!¡Huyan!<br />Son aquellos que están por encima mío en experiencias de vida los que dejan de jugar. Aquellos que le temen a la competición. Yo estoy preparado para la competición. Mi generación esta dispuesta a competir, y prueba de eso es que todavía juguemos. Competimos y nos agrada, nos entrena.<br /><br />Yo juego.<br /><br /><br />Sin saludos.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com15tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1126252844143934812005-09-09T04:48:00.000-03:002005-12-28T02:46:23.973-03:00<span style="font-size:130%;"><strong>El Poder de la Negación</strong></span><br /><br /><br />¿Negación? Extraña palabra. Nunca había oído hablar de ella. Sucedió que estaba en una situación de mi vida cotidiana, cuando uno de mis allegados la pronunció. Cuesta admitir que uno no conoce cierta parte, por mas pequeña, diminuta, y lejos de sí mismo sea, de su lengua madre. Callado y "silbando bajito" (como diría un 'pibe de barrio'), corrí en la búsqueda del diccionario (o 'mataburros' como lo llamarían aquellos nombrados en el anterior paréntesis).<br /><br />negación.<br />1. f. Acción y efecto de negar.<br />2. f. Carencia o falta total de algo.<br />3. f. Gram. Categoría semántica a la que pertenecen ciertas voces que sirven para negar.<br />4. f. Gram. Estas mismas voces.<br /><br />Este resultado me llevo a otra búsqueda. El verbo "negar".<br /><br />negar.<br />1. tr. Decir que algo no existe, no es verdad, o no es como alguien cree o afirma.<br />2. tr. Dejar de reconocer algo, no admitir su existencia.<br />3. tr. Decir que no a lo que se pretende o se pide, o no concederlo.<br />4. tr. Prohibir o vedar, impedir o estorbar.<br />5. tr. Olvidarse o retirarse de lo que antes se estimaba y se frecuentaba.<br />6. tr. Dicho de un reo preguntado jurídicamente acerca de un delito de que se le hace cargo: No confesarlo.<br />7. tr. Desdeñar, esquivar algo o no reconocerlo como propio.<br />8. tr. Ocultar, disimular.<br />9. prnl. Excusarse de hacer algo, o repugnar el introducirse o mezclarse en ello.<br />10. prnl. Dicho de una persona: No admitir a quien va a buscarla a su casa, haciendo decir que está fuera.<br /><br />Tengamos en mente, para el siguiente análisis, los puntos 1, 2, 4, 5, 7 y 8.<br /><br />Ciertas cosas tienen un límite, incluso en mí. Hasta ahora, cuando escribo estas líneas, pensaba que tenía una paciencia digna de elogio, pues eran contadas las veces (y muy predecibles y aceptables) en las cuales me veía superado por la situación. Pero tal vez, esta ocasión carece de tales justificativos, pues ha agotado mi paciancia muy pronto. Más pronto de lo que acostumbro: y tan sólo después de una declaración, su justificación y una respuesta.<br />Aquellos asiduos a este antro de expresión unilateral sabrán ya a qué me refiero; aquellos ajenos, recomiéndoles vean el post anterior y sean tan amables de leer sus comentarios.<br /><br />Volviendo a mi paciencia, son pocas las cosas que pueden agotarla, o siquiera hacerle mella. Pero una de las grandes debilidades en ella, es el no-entendimiento. No el simple, vano y difícil hecho que yo no entienda algun tópico; sino, el no-entendimiento en un intercambio de ideas, cualquiera sea la causa. Sucedió en aquellos benditos comentarios, que un sujeto no quiso, pudo, sintió, decidió, opinar sobre lo que había escrito vuestro anfitrión. En cambio, simplemente (o complejamente, dado lo que desencadenó), hizo una breve reseña destinada a mi intelecto. Nunca podría sentirme ofendido por eso, y mucho menos sabiendo la reseña correcta y concreta, sabiéndola justa y apropiada. Pero, como siempre que soy calificado o tildado de alguna manera, me interesó en esa oportunidad saber porqué. En este punto comienza el no-entendimiento. El susodicho lector/comentarista hace su justificación de las implicancias que me hace cargo. Yo no quedo satisfecho con ellas, se lo aclaro, pero sin embargo le doy las gracias. Acto seguido, un cartel reza "el autor ha eliminado esta entrada", la cual nunca sabremos qué decía o quién la firmaba; y luego las contradicciones, faltas de ortografia, sintaxis y redacción se hacen brillar por doquier. Permítanme referirles este último detonante.<br /><br />microvida dijo...<br />Mira M yo soy un pibe de barrio, al que le gusta saborear el bendito nectar que es el producto que nos deja la vaca entre otras cosas.<br />Leo cuando puedo.<br />ESCRIBIR ELEGANTE NO ES ESCRIBIR BIEN, ESO LO APRENDI EN UN PARTIDO DE FÚTBOL CON MAPUCHES EN EL SUR. AHORA SI, TENGA EN CUENTA QUE REFLEJA COSAS DEL SUBCONCIENTE. POR EJEMPLO LA SOBRESTIMACION DE UN INDIVIDUO.<br />LO SALUDO<br />D<br /><br />Aquí quiero dejar mis impresiones mientras leía la respuesta. Continúen si son tan amables.<br /><br />microvida dijo...<br />Mira M yo soy un pibe de barrio,<br /><em>lo felicito, yo no</em><br />al que le gusta saborear el bendito nectar que es el producto que nos deja la vaca entre otras cosas.<br /><em>dejaré esto pasar, pues estimo que será una frase 'muy conocida' en algún barrio.</em><br />Leo cuando puedo.<br /><em>lea más a menudo.</em><br />ESCRIBIR ELEGANTE NO ES ESCRIBIR BIEN,<br /><em>¿Yo escribo elegante y usted escribe bien?¿O simplemente Yo escribo elegante y usted nada?</em><br /><em></em>ESO LO APRENDI EN UN PARTIDO DE FÚTBOL CON MAPUCHES EN EL SUR.<br /><em>espero sinceramente que cite otra frase de su barrio.</em><br />AHORA SI, TENGA EN CUENTA QUE REFLEJA COSAS DEL SUBCONCIENTE.<br /><em>inconciente sería el termino correcto.</em><br />POR EJEMPLO LA SOBRESTIMACION DE UN INDIVIDUO.<br /><em>Si se refiere a mí en su ejemplo, ¿no quedó clara mi sobreestimación cuando me llamé pedante y altanero? Esperaba que así fuera.</em><br />LO SALUDO<br /><em>Yo no.</em><br />D<br /><em>M.</em><br /><br />Tal vez, ustedes, mis Pequeños Lectores ('que pueden consiguir en el puesto instalado en el hall del teatro'), no estén en tal no-entendimiento como Yo. Puede ser que no se encuentren a mi nivel de entendimiento, y por eso, que no los desconcierte lo que 'microvida' escribió. ¡Sea! Dejen de leer entonces, no daré más vueltas que las que crea necesarias.<br />Después de leer, y leer, y volver a leer ese último comentario, mi paciencia se agotó, y decidí que una simple respuesta no era suficiente honor para hacerle a alguien que logró colmarme, y tenerme tan desentendido. Me propuse escribir un post entero dedicado a su falta de coherencia y singularidad (en el sentido cuántico, desde ya).<br /><br />Algunos de ustedes pueden estar preguntandose qué tiene que ver la negación con todo esto.<br />Déjenme alumbrarlos.<br />Soy Pedante, Arrogante, Soberbio, Sarcástico, Insolente, Impertinente, Intolerante, Altanero, Egoísta, Ególatra, Narcicista, Arbitrario, Parcial, Subjetivo, Autoritario, Elitísta y muchas otras cosas más. Pero todas ellas con mayúscula. La mayúscula que se merecen por ser portadas con conocimiento de causa, con sapiensia y con frialdad. Con la mayúscula que determina que me hago cargo, y que no son carga para mí, sino alas a mis ideas<br />y pensares.<br />La negación, sin embargo, es algo que no me atribuyo. Nunca podría hacerlo, pues de hacerlo tendría que negarla, y por tanto no padecerla. Una paradoja digna del estilo EPR o bíblico. Pero cualquiera puede adjudicárla y Yo lo hago en estas líneas.<br />Sí.<br />Microvida niega que algo es verdad. No reconoce algo. Estorba. Olvida lo que antes estimaba. Esquiva algo como propio. Oculta. Disimula.<br />¿Porqué? Porque no puede entender que seres como Yo, su servidor, seamos como somos. Que amemos pensar como pensamos. Que podamos ser felices, relajarnos en nuestra plenitud de conocimiento propio.<br />Niega que siempre se estima ser superior a otro. Esquiva el placer que puede brindarle saberse mejor, cuando se da cuenta que tiene que haber alguien peor. Trata de ocultar estas emociones y pensares proyectados bajo un manto de inconciencia (o subconciencia, si él prefiere).<br />Es esta Negación, este No, el que precede al entendimiento entre usted y Yo.<br /><br />Lo aplaudo, señor. ¡Y lo aplaudo de pie! Pocos que conozco han sido dignos de tanta atención de mi parte. Me siento orgulloso de conocer su intelecto, capaz de discrepar tanto del mío. Nos felicito. Realmente, usted y Yo, brindamos aquí, en este espacio, una visión particularmente diferente del mundo. No podría haber luz, sin oscuridad. Elija el que más le guste, esté usted seguro: yo habré pensado en el otro. ¡Gracias! Y le deseo una continua discrepancia con mi persona.<br /><br />Sin Saludos.<br /><br />M.<br /><br />PD: Espero que el señor Microvida sepa, entienda que aquellos que confrontan aquí son nuestros intelectos, los cuales estoy seguro se quitarian los ojos el uno al otro, y luego pelearían a ciegas hasta que caiga el primero. Pero, por supuesto, nadie, ni Yo, ni dios, logra ser simplemente un intelecto.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1125037313286103012005-08-26T03:07:00.000-03:002005-12-28T02:47:07.506-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Impersonalicemos</span></strong><br /><br />Los mandaría a todos al re carajo. Sí. ¿Razones? Varias.<br />1. Esto es mi blog, asique lo que yo diga acá, es ley.<br />2. Repito, MI blog, por ende las opiniones son mias y sobre mi (si así lo deseo).<br />3. Esto es UN blog. No un foro (el MSN existe, y para los viejos: ICQ)<br />4. Hace mucho que no mando a nadie a la mierda.<br />5. Me levanté cruzado.<br /><br />Como podrían haber previsto, por el uso de un condicional en la primera oración, después de la lista viene un "pero", a eso voy.Pero, de mandarlos al carajo, podrían pasar dos cosas:a. Me toman en serio (inimaginablemente la gente hace esto mas frecuentemente de lo que creen), o se sienten ofendidos y verdaderamente se van a la mierda.b. Les encanta la agresividad y personalidad del blog, por ende, hacen caso omiso del "raje" y siguen visitandolo. (¿masoquistas?)<br />Para aquellos nuevos en este antro (porque espero que haya gente nueva leyendo esto), en mi primera aproximación a lectores, comenté que no era muy valiente o corajudo que digamos; entonces, sabemos que no los mandaré al carajo, y pasaré a la impersonalización del blog. ¿Qué? Retirar los análisis sobre mi personalidad o mis emociones, al menos por el momento (o hasta que algo digno de comentar suceda).<br /><br />GCU: la evolución de los pronombres, visteS?<br /><br />Hace ya alrededor de una década que escuché por primera vez la utilización de la S al final de los verbos conjugados en la segunda persona del singular (i.e.: vos vistes, vos corristes, etc.). Generalmente, la "tribu-urbana" que utiliza más comunmente que las otras esta modalidad de conjugación, es la GCU (Gente Como Uno, gordi); o sea, los más vulgarmente conocidos como "chetos". La mayoría de la gente toma esta "s" como un yerro, sobre todo aquellos que se encuentran una generación (mínimo) por encima nuestro. Opinan que es una muletilla y que debería ser erradicado.<br />Yo opino lo contrario y tengo una teoría para fundamentar mi opinion, a saber.Los idiomas a lo largo del tiempo evolucionan de alguna maneras. De hecho, nosotros no usamos el español como por primera vez surgió: con Fs en vez de Hs, Xs por todos lados. Estoy seguro que las modificaciones en la manera de hablarlo surgieron antes que las de la escritura. No soy un estudioso sobre la lingüística y su evolución, pero alguna vez se preguntaron cómo pudieron llegar a ése acento particular los franceces, siendo hijos idiomáticos del latín, como nosotros. Yo creo que hubo en algún momento un Rey, o algo por el estilo, gangoso o con algún otro problema, y la gente hablaba como él. ¡Puede haber sucedido!<br />No nos vayamos de tema. Las Ss demás. La evolucion en un idioma surge espontáneamente, generalmente entre la plebe, y nunca le cae bien a los estudiosos. Siempre tiene que haber alguien para oponerse al cambio, para ofrecer resistencia. Prosigo a explicarles mi teoría.Desde que estudiamos por primera vez los pronombres y las conjugaciones de los verbos en los diferentes tiempos verbales, nos dicen que hay seis pronombres: 3 singulares (yo, tú, él), y 3 plurales (nosotros, vosotros, ellos). Cada uno de ellos tiene, en los diferentes tiempos, una difernete acentuación y desinencia. También nos enseñaron que el pronombre "vos" (usado modernamente, no como apócope de vosotros), se ubica como segunda persona del singular. Este hecho podría ser correcto dada la significancia del pronombre. "Vos", implica el direccionamiento del verbo a hacia nuestro interlocutor, de la misma manera que el "tú". Pero, si analizamos algunos ejemplos, nos damos cuenta que la conjugación es inadecuada; si bien tal vez no al sistema gramatical, sí es inadecuado al oído. Poder explicar los ejemplos, se vuelve complicado sin poder presentarles el enfasis de la voz, pero les pido que sean literales al leer y que amplifiquen los tildes ortográficos y los acentos tácitos.<br /><br />Tú amas - ¿Vos amas o vos amás?<br />Tú corres - ¿Vos corres o vos corrés?<br />Tú sales - ¿Vos sales o vos salís?<br />Tú comes - ¿Vos comes o vos comés?<br /><br />Suficientes ejemplos. Creo que para cualquiera que use habitualmente el pronombre vos, es la segunda opción la que utilizamos. Acabamos entonces de demostrar que NO tiene la misma congujación y no pueden ser tomados como iguales. Si bien no en la manera ortodoxa, de la manera costumrbista.Siguiendo con esto ya aclarado, vemos entonces que el "vos" merece otra conjugación. Dado su origen, siendo un hijo del "vosotros", podemos remitirnos a su conjugación y decir (nuevamente, exageren la acentuación):<br /><br />Vosotros amáis - Vos amáis<br />Vosotros corréis - Vos corréis<br />Vosotros salís - Vos salís<br />Vosotros coméis - Vos coméis<br /><br />El "vosotros" es un pronombre ya arcano para nosotros. Su utilización es ridiculamente formal, dado que nos remite a tiempos de nobleza y reyes. En cambio, usando la conjugación trastocada del ejemplo del "tú", que posee un tono más informal, podemos utilizar el "vos" sin ningún tipo de problema. Resulta evidente que esta NUEVA conjugación es una modificación del "vosotros", y como tal, deberíamos respetarla en todos los aspectos.Tal vez, el verbo más usualmente "mal congujado" por estos GCU, sea "ver". Permitámonos un ejemplo.<br /><br />¨Sí. Obvio. Re-típico, vistes?" -hembra de veintitantos perteneciente a los GCU, en un aparente ritual de apareamiento.<br /><br />En el ejemplo, el locutor, se dirije explicitamente hacia su interlocutor pidiendo su aprobación en cuanto a un hecho visble. Es perfectamente notorio el pronombre tácito "vos" en esta oración (tanto porque sabemos que quien está hablando es jóven, como porque estamos poco habituados el uso del 'tú'), si bien, muchos de ustedes consideran que esa 'S' está de más. Repitamos el ejemplo, pero agreguemos el pronombre.<br /><br />Vos "Sí. Obvio. Re-típico, vos vistes?"<br />Tú "Sí. Obvio. Re-típico, tú viste?"<br />Vosotros "Sí. Obvio. Re-típico, vos visteis?"<br /><br />Sinceramente, les pido que analicen los ejemplo y determinen cuál es el mejor. No en gramática, sino en resonancia.Es de mi opinión que esta conjugación del 'vos' es la correcta, tanto por sus orígenes, su personalidad y su sonancia. Creo que la evolución en los lenguajes no se lleva en todos lados al mismo tiempo, que tienen a separar grupos (pequeños o grandes) de personas, que casi siempre van en contra de las reglas. Pero creo que este pronombre, puesto ya en boca de todos, tiene la suficiente fuerza y particularidad como para ser individualizado y tomado como un 7mo pronombre. Creo, además, que la utilización de estos GCU, tiene fundamentos (aunque sea involuntaria su generación).<br /><br />Bien. ¿Aburridos? Tengo esta idea desde primer año del secundario. He obtenido varios 1s (unos) por plantearla a mis profesoras, me han hechado de la clase, pero nadie nunca me dio una respuesta. No pretendo tener la razón, pero encuentro mis argumentos lo suficientemente fuertes como para someterlos a un debate. Necesito que la gente opine y determine si piensa o no igual que yo. ¿Será lo que digo acertado?¿Aceptado? Me chupa un huevo. Al menos pude sacarlo y explicarlo.<br /><br />Un dato más: notaron que nosotors decimos "tuteame" para tratarnos de 'vos'?<br /><br />Sin saludos.<br /><br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com21tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1124867787322495382005-08-24T04:13:00.000-03:002005-12-28T02:47:55.483-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Ignominia</span></strong><br /><br />Después de haber escrito ya tres posts, que quien los lea, puede pensar que fueron completamente intencionados; después de haber recibido varias respuestas, uno termina aquí.<br />Sigamos con la comparación de mi última reflexión, en la cual mencionaba dos personajes (porque no son personas) del ámbito literario: los nefastos Bucay y Coelho. Tengamos esos nombres presentes mientras sigo con mis cavilaciones.<br />Sin ninguna pretención, empecé con este blog. Ni siquiera una idea básica. Nada, cero, naranjas, dulces. Entonces alguien respondió al primer post y me dijo que lo siga haciendo, que "podría ser muy bueno en esto". Genial, nunca nos hace mal escuchar o leer estos comentarios, y siendo bastante fáciles de controlar mediante las adulaciones, hice caso al consejo y seguí. Me propuse escribir un análisis a manera de ensayo sobre cómo es que la sociedad es retrograda, y cómo esto puede manifastarse en el lenguaje de las llamadas "tribus urbanas". A mitad de camino perdí el norte y dejé de escribir. ¡Pero tuvo mas respuestas y análisis que el anterior! Esta bien, mi fama iba en aumento, sólo tenía que mantener un evidente control de la situación, seguir con la misma línea que hasta entonces y podría ser leído por mucha gente. ¿No es eso lo que todo escritor quiere? ¿Quién es aquel que escribe para no ser leído? Tal vez estuve inspirado, tal vez me esforcé por crear un vínculo hilarante con el lector en mi última nota, pero fue de todas, la menos popular. La única con esmero, un norte, intención, atención, cuidado, es la menos leída. Debería, en realidad, estar conforme con ello, pues demuestra la veracidad de mi reflexión; pero, la verdad, apesta ser impopular.<br />Retomemos aquellos dos nombres. ¿Donde estan hoy? No. No me pienso tomar el trabajo de buscar información actual sobre ellos (no me tomo el trabajo para escribir decentemente, mucho menos para buscar eso). Pero yo camino por la calle, veo vidrieras, escucho gente hablar mientras caminan por la calle, tengo internet, veo la tele y hasta eventualmente, leo el diario mientras hago mis necesidades. Entonces, ¿dónde estan ellos? ¿qué hacen? Bien. Después de su increíblemente exitosa saga de libros, de Coelho no escuché hablar nunca más. Y de nuestro local Bucay, lo único que sé es que tiene un artículo al final de la revista VIVA que sale los domingos. Impopularidad. Ignominia. ¿Moda?<br />Sí. Tal vez fueron una moda. ¡Pero al menos SU moda duró mas de 3 escritos! Uno publicó varios libros, el otro hasta consiguió un programa de televisón.<br />El internet es una vorágine y nos atrapa a todos. En menos de una semana, pude verme crecer, estar en el "cenit de la parábola", y verme caer.<br /><br />¡Otra vez!<br /><br />Pero no lector, no confunda esas dos palabras. No dicen "otra vez", con la resignación digna de alguien que tropieza dos veces o más con la misma piedra o montaña; dicen "otra vez" con la alegría de un niño que acaba de tirarse dentro de un canasto con rueditas por un barranco y logró salir vivo por pura casualidad.<br />Sí. ¡Otra vez!<br />Quiero otra vez escribir algo que haga que la gente comente. Tener una, aunque sea de entre varios posts, tener una buena idea, que la comenten y después poder volver contento a mi ignominia. Para volver a salir al tiempo con alguna otra idea brillante. y asi in sécula seculorum.<br /><br />¿Optimismo? ¿Conformismo? Aceptación. Aburrimiento. Necesidad.<br /><br />Tal vez, la agresividad pasó de moda. Fui agresivo con mis lectores y eso los asustó. Pero no puedo ablandarme tan derrepente, y como nota final dejarles saludos. ¡NO! Será mi marca, mi distintivo. No dejar saludos. Incluso hay quienes se adaptaron al modus operandi y también me quitaron el saludo.<br /><br />Bien, que así sea.<br /><br />......... (suspenso)<br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1124435873578628352005-08-19T04:16:00.000-03:002005-12-28T02:49:07.206-03:00<strong><span style="font-size:130%;">Fasinación inesperada</span></strong><br /><br />Sí. Ése es un título apropiado para el sentimiento que surgió de mis entrañas cuando revisé mi blog esta noche. No porque haya descubierto cosas entre mis líneas, ni porque me haya olvidado de algo que mencioné y lo recordé. Sé que tal vez sea común para otros, pero para personas como yo, sorprenderse por algo que no sea uno mismo, es extraño, inesperado. Sin embargo, esta situación no sería en sí misma fascinante. ¿quién puede ser o hacer algo mas fascinante que yo? Exacto. Entonces, al ver que había varios "comments" en mis dos escritos, y saberlos uno peor que el otro, me fascina que haya personas capaces de encontrar cosas sobre las que comentar, cosas que decir con respecto a mis posts. Éso es fascinantemente inesperado.Pero mi fascinación no termina ahí. No termina al ver el inesperado número de "comments" mayor que cero, ni cuándo leo que son críticas y opiniones sobre mis escritos; sino cuando las personas discuten entre ellas, o me preguntan porqué dije tal cosa o tal otra. Eso es verdaderamente increíble.<br /><br />¿Cuál será la causa?<br />Podría tratarse de un caso coelhismo. Si bien no en el sentido que podrían leer ciertas personas que hallasen a dicho autor interesante, ni otras que opinan que "el arma del guerrero de la luz es una linterna"; sino, en el caso que una persona escriba basura, y la gente lo compra, lo analiza, descubre un gran artista, filósofo y/o pensador. Un ejemplo de este caso es el afamado señor Bucay.<br /><br />¿Cuál es el efecto?<br />Desde mi peculiar punto de vista, me resulta auto-insultante estar comparándome con este tipo de personas; sin embargo, me encuentro entre la espada y la pared. por un lado, podría tratar de desprenderme de este tildativo, y comenzar a escribir cosas originales, atrapantes, reflexivas e introspectivas, jugandome a la posibilidad (grande, por demás está decirlo) de que nadie me lea o comente o discuta más; por el otro lado, podría continuar con este tipo de mamarrachadas y ganarme la regularidad de lectores, sus comentarios, opiniones y discuciones, ya sea porque piensen "qué grande este flaquito, mirá cómo te hace pensar con lo que escribe", o porque solamente "quiero saber con qué tipo de mierda va a salir ahora".Creo que como cualquier escritor anónimo, estoy tentado por el camino fácil, rapido, y con éxito. Además, no soy un tipo valiente, ni corajudo, ni honorable. No pienso gastar energía en luchar contra la tentación. ¡Qué alivio! Y pensar que podría estar malgastando energía en pensar mucho, mientras podría usarla en no-pensar y vanagloriarme de mi mediocridad.<br />"Ganar se elije".<br />"Lo más importante es ser capaz de elejir".<br />Entonces, si ganar se elije, fallar también. Y como yo ELIJO mi mediocridad, eso me hace tan importante o desafiante como aquel que cree que gana. Excelente. Adoro estas paradojas del lenguaje dignas de Gödel, o de la EPR. Mediante un simple revés de palabras, mis escritos tienen, por axiomas referidos a mi como si fuesen Mandamientos, el mismo valor que los de cualquier escritor exitoso, exento del síndrome coelho-bucay, original e interesante.<br /><br />¿Trabajar duro rinde frutos? No.<br /><br />Dejo aquí una frase que recordaba hoy, de un libro recientemente devuelto, sin saber que lo había prestado (honestidad para el devolvedor, los libros sean sagrados).<br />"Amar a alguien es querer ser causa de su alegría" -Spinoza.<br /><br />Insisto en no dejarles saludos.<br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1124348430100791292005-08-18T03:58:00.000-03:002005-12-28T02:49:59.820-03:00<strong><span style="font-size:130%;">La Torre de Babel sigue cayendo</span></strong><br /><br />Parece increible, pero es cierto. Los idiomas se siguen generando, todo en contra de la gran marea de la llamada globalizacion. Resulta tonto lo que digo, cuando TODOS los padres que pueden mandar a sus hijos a que aprendan inglés. Cuando hay estadisticas que hablan que los idiomas mas hablados en el mundo son el ingles, el español y el chino. Pero yo quiero ir a niveles mas bajos. Niveles en los cuales la creacion de un idioma repercute mas fuertemente. sin irme muy lejos, esto me pasa a mi directamente.Por mas extraño que´parezca decirlo, mi entorno social y yo desarrollamos palabras o frases verbales a causa de las vivencias. palabras inexistentes o peor aun: utilizamos palabras que significan una cosa para decir otra. ese tipo de generacion de un idioma, hace la diferencia cuando dos o mas grupos se reunen. no solo sus habitos seran diferentes, sus intereses y demases; sino tambien su manera de comunicarse. tendran hasta acentuacion diferente, palabras creadas, palabras cambiadas, frases, e incluso podran mezclar otros idiomas. en el peor de los casos se puede utilizar palabras en otro idioma para decir cosas que no significan en realidad. con lo cual se genera un desastre: la incomunicacion.<br />Lo cual me hace pensar en el tema ese, muy en boca de cualquier (como su servidor), de las tribus urbanas. Bueno, mediante el idioma (sea biblica o cientificamente), la gente se divide y separa. se separa en naciones o lo que sea. pero en nuestro caso; dentro de la misma ciudad nos vemos divididos... uff.<br />vuelvo a la actitud del post anterior... porque? facil. queria decir algo copado pero me lo olvide. estoy en el laburo y las llamadas cortan de raiz mi creatividad.<br />bajon...<br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-15408604.post-1123999183117813662005-08-14T06:55:00.000-03:002005-08-14T06:20:40.483-03:00No sé quiénes serán aquellos afortunados (o no) que lean este, y los siguientes posts que planeo hacer; pero sean quienes sean: hola.<br />¿Acaso esperaban una recepción más calurosa o un comentario más armado o interesante? ¿Porqué? Es MI blog, y hago lo que quiero. Por ejemplo, y por estúpido que suene (o se lea), ahora dejo de escribir.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />¿Ven?<br /><br />Me parece que esto es demasiada libertad para mi. Ya estoy haciendo idioteces. Pero, no es lo que hace cualqueira cuándo siente que es libre. Tal vez no es la mejor manera de ser libre, dado que estoy encerrado en mi habitación, frente a una computadora que me costó una fortuna, con una conexión a internet bastante cara, un sábado por la noche... No. No es la MEJOR manera, pero es lo que hay, asique a eso voy.<br />Sigo con lo de antes: no es cierto que cuando nadie nos ve, o sentimos que estamos solos o no nos importa nada (como al ingerir un poco más de lo recomendado de alguna sustancia etílica u otras), cantamos, bailamos, saltamos, gritamos, y todas esas estupideces. O escribimos un blog, si no somos tan desinhibidos. Entonces acá esta esa pequeña cuota de libertad que yo puedo tener. <br />Hace algún tiempo pensaba (mentira, estaba convencido) que podía escribir un libro, una novela sobre alguna de las sesiones de rol. Después, como por la revancha, pensé que tal vez podría escribirlas en forma de cuentos cortos (al estilo Asimov). Luego me dije que podría intentar la comedia. Es obvio para todos los que esten leyendo esto que fracasé en todos estos intentos. ¿Falta de talento?¿Motivación?¿Constancia? Elijan, cualquiera puede ser.<br />Mucho tiempo despues, o sea hoy, me dije que si no podía con algo tan extenso y de preparación tan meticulosa, tal vez podría simplemente comentar lo que me pasa un día, lo que pienso sobre algo (aunque no piense mucho sobre nada)[lo que acabo de decir es contradictorio, no?], cualquier cosa. La gente, cualquiera, mis amigos, mis in-amigos, desconocidos, todos, tal vez incluso alguien que por poner una palabra en Google llegue acá (pobre), cualquiera puede leerme y criticarme. Mandarme a la re-negrida-ya-saben-qué y demases.<br />Entonces empecé a escribir esto. Como ven, nada. ¿O acaso dije algo y no me di cuenta? No.<br /><br />Para terminar, tampoco pienso decir nada. Y mucho menos aclarar porque le puse al blog "Tenes fuego?". Lo que sí les puedo decir con respecto al nombre es que me molesta. Sí. Me molesta que de todas las alternativas que ingresé al registrar el blog, lo único que se me pudo ocurrir fue eso. Todo gracias a mi adicción no-reconocida al tabaco dromedárico. ¡Lógico! Sólo después de escribir semejante zarta de sinrazones, y justo al terminarla, se me ocurre un nombre un poco mas aceptable para esto. Sí. Soy un HdM (Hijo de Murphy).<br /><br />No les dejo saludos.<br /><br />M.M.http://www.blogger.com/profile/04586691921463847462noreply@blogger.com0